Una bomba estalló en el mausoleo del ayatolá Ruhollah Jomeini, en el sur de Teherán uno de los sitios más concurridos de la capital persa. Según la agencia oficial Fars, el atentado habría sido perpetrado por un atacante suicida y, además de la muerte del agresor, otro civil habría muerto.  

Testigos aseguraron que la bomba explotó en uno de las puertas de ingreso, donde son dejados los zapatos de los peregrinos antes de entrar al mausoleo. El estallido dejó ocho heridos.

El mausoleo de Jomeini está levantado al sur de Teherán, cerca del cementerio de Behesht-e-Zahra, donde están sepultados los caídos por la revolución y la guerra con Irak.

El 4 de junio pasado, en ocasión del 20 aniversario de la  muerte del fundador de la República Islámica, el Líder Supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, dio un discurso ante miles de personas en ese lugar.

SIGUEN PROTESTAS
Mientras esto ocurría al sur de Teherán, en el centro de la ciudad cientos de personas protestan en una nueva marcha contra los resultados de las elecciones celebradas la semana pasada.

El subdirector de la policía nacional iraní, Ahmad Reza Radan, explicó que cualquier manifestación es ilegal y que las fuerzas de Seguridad actuarían en consecuencia.

"Debo recalcar que todas las protestas habidas en los días previos han sido ilegales y que la de hoy también lo es. La Policía actuará con firmeza y determinación", aseguró Radan.