Año a año, el ATP de Viña del Mar ha debido enfrentar la incertidumbre de dónde realizar el torneo. Esto, debido a los altos costos que implica montar un evento de estas características, en el que solamente por concepto de arriendo de instalaciones, la organización debe cancelar sobre $ 50 millones.
Es por ello que el Grupo Fillol está evaluando hace mucho tiempo la opción de cambiar de sede para el evento, siendo la primera opción el remodelado complejo Sausalito.
El recinto estará operativo a mediados de este año, y la idea de la producción es que se construya un court definitivo. No obstante, antes se deben generar los recursos para iniciar las obras.
Por esta razón, Alvaro Fillol ya ha tomado contacto con las autoridades de la Municipalidad de Viña del Mar para ver la factibilidad de este proyecto.
"Hemos conversado con la municipalidad y nos dicen que habrá un club de tenis ahí. Y ellos quieren hacer el torneo, por lo que habrá que ver cómo se desarrollan las gestiones. Si se concreta, sería muy útil, porque nos permitiría ahorrar bastante", afirma Alvaro Fillol, director del certamen.
Asimismo, el ex tenista está consciente de que el principal problema es la aprobación de recursos. Por ello, espera reunirse en las próximas semanas con Natalia Riffo, la nueva ministra del Deporte. "Queremos contactarnos con ella para hablar de este tema y poder avanzar", adelanta.
Compromiso local
Consciente de esta situación, la alcaldesa Virginia Reginato expresa todo su apoyo a la iniciativa y anticipa que espera concretar lo antes posible estos planes.
"Está la idea de hacer un court central similar al de Las Salinas y esperamos que una vez que nos entreguen Sausalito, entre julio y agosto, poder presentar el proyecto a las autoridades para que tener los recursos e iniciar la construcción de las canchas. Tenemos muy claro que armar y desarmar una infraestructura todos los años sale demasiado caro", comenta la autoridad viñamarina.
En este sentido, Reginato destaca que "yo tengo un compromiso con los Fillol y espero poder cumplirlo, pero eso dependerá de la cantidad de recursos que nos asignen. Espero que los fondos no se queden sólo en Santiago. Es más, nosotros ya tenemos un proyecto bastante avanzado al respecto".
Y agrega: "Tenemos que hacer todos los esfuerzos para que haya un estadio permanente para el tenis, que es el deseo de todos".
Con respecto a los plazos, se ve complejo que las nuevas instalaciones estén disponibles para la próxima edición, por lo que se vislumbra que esto sea una realidad en 2016.