Pese a los optimistas pronósticos, la sintonía del homenaje funerario a Michael Jackson fue sólo respetable.
Así, el programa se anotó unos 31 millones de espectadores en EEUU. Menos de los que vieron el funeral de la princesa Diana y la toma de mando del presidente Barack Obama en enero pasado. A esa cifra, claro, se le suman otros tantos millones que lo siguieron a través de internet.
El homenaje, que contó con las actuaciones de gente como Stevie Wonder y Mariah Carey fue exhibido de manera simultanea en 19 canales, tanto de TV abierta como de cable en EEUU.
Los números de la toma de mando de Obama en enero fueron de 38 millones de espectadores. Mientras en 1997, Diana de Gales logró 33.2 sólo en EEUU.