Auge y caída de la ciudad símbolo de la exuberancia inmobiliaria

Dubai logró transformarse de un desierto absoluto en una de las ciudades más lujosas del mundo en menos de 15 años. La rapidez en el desarrollo les pasó la cuenta.




Si de récord se trata, la ciudad de Dubai es la que más puede decir al respecto. Con aproximadamente 2,2 millones de habitantes, este emirato, de cuatro mil kilómetros cuadrados, ha sabido sobresalir por tener el edificio más alto del mundo, el Burj Dubai; el centro comercial más grande del mundo, o la cancha de esquí techada más extensa del orbe. Logros que aunque parezca extraño, no han sido fruto de las riquezas generadas por el petróleo. Sólo el 6% del PIB de Dubai es producto del oro negro y no es un gran productor de petróleo.

En los últimos 15 años, el gobierno -encabezado por el jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum- apostó por el desarrollo inmobiliario. "Los jeques -que tienen cuotas de petróleo- vieron que tenían dinero, cultura y que era momento de convertir ese desierto en un Manhattan o Shanghai", dice un chileno que desarrolló proyectos en Dubai. "La ciudad atrajo a muchos inversionistas extranjeros que creyeron, pero todo se sustentó en algo artificial", agrega.

El Financial Times asegura que la imaginación llegó a tanto, que hubo proyectos que no se concretaron, tales como un parque de entretenimiento que debía ser más grande que Orlando.

Todo este sueño comenzó a derrumbarse el otoño pasado, con la llegada de la crisis financiera internacional y con la brusca caída del precio del petróleo. "El gran problema fue que se mezclaron proyectos bien pensados, con jeques que lo único que querían era gastar y que terminaron generando una burbuja y un gran endeudamiento", asegura un arquitecto chileno que trabajó en esa zona. "Hoy no se vende ni un metro cuadrado", afirman conocedores de Dubai.

Según un análisis de la Colliers International, el Emirato está construyendo la misma cantidad de oficinas que Shanghai y Moscú. Con la diferencia de que, en la metrópoli china viven 20 millones de habitantes y en la capital rusa, más de 10 millones. En Dubai los residentes son dos millones. De ahí, la pregunta, ¿quién utiliza tantas oficinas?

SU HISTORIA
Es difícil creer que esta ciudad repleta de lujos y ostentación haya sido hace menos de 50 años un completo desierto, sin carreteras y prácticamente sin electricidad. Hace bien entrado el siglo XIX, Dubai fue sólo una parada de la ruta comercial entre Mesopotamia y el Valle del Indo, habitado por la tribu Bani Yas, dirigida por la familia Maktoum, la dinastía que aún preside Dubai.

El éxito de la ciudad estado comenzó a gestarse en 1966, en el proceso de liberación del dominio colonial británico. En ese entonces se encontró, por primera vez, petróleo. El 2 de diciembre de 1971 Dubai junto con Abu Dhabi y otros cinco emiratos, crearon los Emiratos Arabes Unidos. Y en 1973 adoptaron una divisa única y uniforme: el dirham de los EAU.

Actualmente, el fuerte de su economía está en el área portuaria, turística y de servicios. La ubicación de Dubai, en los cruces entre Europa, Asia y Africa, la dotan de una accesibilidad idónea. De hecho, prácticamente todas las principales ciudades alrededor del mundo tienen vuelos directos a Dubai. Según la prensa internacional, más de 80 líneas aéreas aterrizan y despegan del Aeropuerto Internacional de Dubai a más de 130 destinos, convirtiéndolo en uno de los aeropuertos más activos del mundo.

Dubai también es base de una de las líneas aéreas más lujosas del orbe. Se trata de Línea Aérea Emiratos (Emirates Airlines), que vuela a más de 80 destinos.

El mini Manhattan que atrajo a ingenieros y aviadores chilenos

Después del mes del Ramadán, en Dubai se decretó feriado hasta el próximo jueves, cuenta el director comercial de Chile en el emirato, Carlos Salas. Ello, junto con las restricciones de información, llevaron a que el problema con la deuda no fuera un tema alarmante. "Acá no se percibe en el ambiente ningún signo de preocupación evidente, ni el temor que se observa en el exterior", afirmó.

Salas sostuvo que pese a la crisis, este año la construcción ha continuado creciendo. Es este sector, en especial en los servicios de ingeniería, donde se desempeñan los chilenos en Dubai, además de la aviación.

"Este es un mercado que recién estamos empezando a explorar, por lo que el comercio bilateral no debiera verse afectado", agrega.

En 2008 se exportaron a los Emiratos Arabes US$ 107 millones, destacando la madera aserrada para construcción, frutas, salmones y frutos secos.

Entre los empresarios que han iniciado proyectos en Dubai figura Fernando Fischmann, quien hace dos años abrió oficinas en la zona.

El creador de las lagunas artificiales Crystal Lagoons, está desarrollando un megaproyecto inmobiliario, llamado Dubai Lagoons. La primera etapa de esta iniciativa estará lista entre diciembre y febrero del próximo año.

La urbe más liberal de Emiratos Arabes

No sólo los lujosos proyectos inmobiliarios marcan el particular presente en Dubai. Rasgos de su cultura la convierten en una verdadera isla en el Medio Oriente.

Si bien tienen la religión islámica como oficial, es reconocido como un país "liberal" en la región. A diferencia de otros países árabes, la legislación sobre bebidas alcohólicas en Dubai es menos rígida para los no musulmanes, quienes pueden comprar y consumir alcohol en la mayor parte de los establecimientos.

Eso sí, aunque al igual que con el alcohol la normativa para la vestimenta es menos restrictiva, es recomendable no vestir minifalda o vestidos cortos en centros comerciales o lugares públicos. Los residentes en Dubai tienen que pedir permiso a sus jefes para obtener un carné de conducir, si no disponen de uno emitido en el extranjero.

Más del 80% de sus habitantes son inmigrantes, con fuerte presencia de británicos y estadounidenses.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.