La inflación subyacente que padece España se aceleró en octubre tras los aumentos operados en los impuestos, lo que viene a añadirse a la presión que recibe el gobierno mientras decide si debe arriesgar el presupuesto indemnizando a los pensionados por costos de vida más elevados.

La inflación subyacente anual, que excluye los precios de los combustibles y de los alimentos, subió al 2,5 % del 2,1 % que tenía el mes anterior, según dijo hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE) en Madrid. Esta cifra se contrapone a la media pronosticada del orden del 2 %, producto de seis cálculos realizados en un relevamiento de Bloomberg. Desde septiembre, los precios subieron un 1,3 %.

El primer ministro Mariano Rajoy se fijó diciembre como fecha tope para decidir si aumentará las pensiones y jubilaciones a la tasa de la inflación y qué medición de precios utilizará para ello. Pese a que el gobierno pugna por frenar el segundo agujero presupuestario más grande de la región europea, el instituto de estadística genera una nueva medición de la inflación que excluya el aumento de los impuestos.

La inflación del consumidor fue del orden del 3,5 %, según los datos de la Unión Europea y de España, lo que cumple con el cálculo publicado el 30 de octubre. Dejando a un lado el impacto del aumento de los impuestos, la tasa de inflación anual que se basa en las proyecciones españolas fue del 1,5 % y caería un 0,5 % si se excluyesen del cálculo los alimentos frescos y los combustibles.

Aumento en las jubilaciones y pensiones

Este año el gobierno aumentó en un 1 % las pensiones y jubilaciones, y este incremento fue una de las pocas promesas de campaña que cumplió desde que asumió al poder en diciembre. El gobierno dice que aún evalúa aplicar una ley que lo fuerce a indemnizar a los jubilados y pensionados por todo monto que se sitúe por encima de ese nivel de inflación. Puede cambiar el indicador que usa para calcular los precios, dijo el viceministro de Economía, Fernando Jiménez Latorre, el 11 de octubre.

El Ejecutivo dijo que decidirá el tema de las pensiones y jubilaciones una vez que tenga a la vista los datos de la inflación en noviembre; el INE publicará un cálculo previo el 30 de noviembre y el detalle pormenorizado el 13 de diciembre. Actualizar las jubilaciones a la tasa de la inflación del consumidor, según se dispone en la ley vigente, podría costar US$3.800 millones (3.000 millones de euros) más, según el Banco de España.

La semana pasada, la Comisión Europea pronosticó que las cinco instancias de aumentos de impuestos y de recortes en el gasto que Rajoy implementó en menos de un año no será suficiente para que España pueda cumplir con las metas para paliar el déficit hasta 2014. La segunda recesión que atraviesan desde 2009, que llevó el desempleo por encima del 25 % y que socava la recaudación, seguirá el año que viene, según los cálculos de la Comisión.