Cerca de 9.000 fiscalizaciones sorpresivas pretende llevar a cabo la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji), en los 4.793 establecimientos de primera infancia de todo el país. Así lo anunció el ministro de Educación, Harald Beyer junto a la vicepresidenta ejecutiva de la Junji, María Francisca Correa, quienes señalaron que las inspecciones se realizaran al 100% de los recintos de educación inicial incluyendo a los particulares.
"Vamos a ser implacables en la fiscalización, el 100% de los establecimientos del país serán inspeccionados, lo que incluye a los particulares", sostuvo Beyer en el jardín infantil "Los Enanitos" en la comuna de San Miguel, señalando que "es un tremendo esfuerzo y estamos preparados para ello".
Asimismo, el titular de educación señaló que "para que la educación preescolar tenga los frutos deseados tiene que ser de calidad, por eso vamos a fiscalizar intensamente los jardines infantiles" y así los "padres y madres van a tener la garantía de tener a sus hijos en establecimientos con los estándares de una educación preescolar con alta calidad".
La fiscalización mide 5 áreas: gestión organizacional, gestión de procesos educativos, buen trato y familia, higiene y alimentación e infraestructura y seguridad. Sin embargo, Correa, sostuvo que son los padres los primeros fiscalizadores. "La familia debe participar de proceso educativo y no delegar solamente en el jardín esta función", agregó.
Hasta el año pasado, sólo se fiscalizaba los establecimientos empadronados, los que no necesariamente están bajo la Junji y que representan el 20% de los recintos de educación inicial. Es por ello que Beyer señaló que la iniciativa busca "asegurar que todos los establecimientos cumplan con ciertos estándares que se han definido como prioritarios", por lo que "vamos a trabajar para educar a los padres, pero también para denunciar".
Cuando la fiscalización arroje malos resultados y el establecimiento no está empadronado, la Junji deriva el caso a la Seremía de Salud, los municipios respectivos y la Inspección del Trabajo, quienes serán los encargados de sancionar al respecto. Si pertenece a la institución perteneciente al Mineduc, se le revoca de inmediato la certificación. La Junji no está facultada para clausurar un establecimiento.