Las autoridades sanitarias de Estados Unidos afirmaron hoy que la pandemia de gripe A ya ha pasado el punto máximo de propagación y está empezando a ceder, aunque indicaron que es probable que haya nuevas oleadas de contagios.
"Estamos empezando a ver un descenso en la actividad del virus en el país, pero aún hay muchos casos de gripe", dijo en una conferencia de prensa la directora del Centro de Enfermedades Respiratorias del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), Anne Schuchat.
La responsable de la evolución de la enfermedad en el CDC concretó que la actividad del virus se sigue registrando en 43 estados del país, cuando hace una semana eran 46.
Sin embargo, advirtió que el grado de contagios sigue siendo "mucho mayor que lo que se ve normalmente a estas alturas del año", y recordó que es probable que se registren nuevos picos de actividad durante el invierno.
"Puede haber muchos altibajos a lo largo de una temporada, y el virus va a seguir circulando las próximas semanas", afirmó Schuchat.
Según las últimas cifras del CDC, el virus de la gripe A ha contagiado a 22 millones de personas en todo el país en los últimos seis meses, y ha causado unas 3.900 muertes, unas 540 de ellas entre niños.
Schuchat subrayó que estas cifras son meras estimaciones, y que las muertes confirmadas por laboratorio son muy inferiores. En el caso de las muertes pediátricas se han confirmado 171 en todo el país, 21 de ellas en la última semana.
Las estimaciones del CDC de que el virus está en decadencia se reforzaron hoy con un nuevo estudio del laboratorio Quest Diagnostics, que apunta a la misma tendencia.
Tras analizar 142.000 tests de gripe A, el laboratorio concluyó que en las semanas siguientes al 27 de octubre, la demanda de pruebas sanitarias relacionadas con el virus había disminuido, tras varias semanas de "gran crecimiento".
"Nuestros datos señalan que la pandemia no se está expandiendo ahora de forma tan agresiva como lo hizo en septiembre y en la mayoría de octubre", dijo en un comunicado el doctor del laboratorio Jay Lieberman.
"El número de individuos que resultaron positivo en las pruebas de la influenza ha caído en todos los grupos de edad desde finales de octubre, con excepción de los mayores de 65 años", añadió.
Lieberman explicó que el declive puede deberse a varios factores, entre ellos que "millones de estadounidenses ya se han infectado del virus" y que otros tantos se han administrado la vacuna, "que puede haber reducido el número de personas susceptibles a la enfermedad".
En cuanto al proceso de distribución de las vacunas, el CDC apuntó hoy que desde la pasada semana se han entregado 11 millones de dosis más a los centros autorizados, con lo que el número total de vacunas disponibles ascendió a 54 millones.
Schuchat aprovechó la conferencia de prensa para hacer un llamado a la "precaución" a la hora de dar besos y muestras de afecto con la llegada de fiestas familiares como Acción de Gracias, el próximo jueves, y Navidad.
"Niños y abuelos compartirán mucho amor y cariño, pero también habrá intercambio de virus", señaló.