La mañana de este viernes, el subsecretario de Transportes, Carlos Melo, junto a la jefa del Programa de Fiscalización, Paula Flores, encabezaron los controles preventivos a buses interurbanos que se han estado realizando en vísperas del fin de semana largo de Año Nuevo.
En medio de los procedimientos, revisaron el estado de cinturones, luces, parabrisas, dispositivos de velocidad, entre otros, a fin de garantizar la seguridad de los usuarios, pues se espera que durante estos días de celebración, un millón y medio de personas salgan desde los diferentes terminales de la región Metropolitana.
En ese sentido, hicieron presente que los buses que no cumplan con todas las medidas de seguridad que incluye la normativa, no podrán continuar operando. En la última semana, ya se han concretado cinco mil de estos controles.
En cuanto a las recomendaciones, Flores indicó que es importante que se "respeten los límites de velocidad, que si se va a beber no se puede conducir. Queremos que esta celebración se haga de la manera lo más segura posible. Queremos que no se repitan las cifras de fallecidos del año pasado".