Irán "no buscará jamás poseer el arma atómica", reafirmó hoy el guía supremo de la República islámica, el ayatola Alí Jamenei, al declarar abierta la 16º cumbre de los Países No Alineados reunidos en Teherán.
La cumbre fue inaugurada en Teherán en presencia de 29 jefes de estado y de gobierno, según las imágenes transmitidas por la televisión de Estado.
El número uno iraní reafirmó no obstante que la República islámica "jamás renunciará al derecho del pueblo iraní a utilizar la energía nuclear con fines pacíficos".
Esta cumbre, tras la cual Irán tomará por tres años la presidencia del movimiento de los no alineados, es presentada por Teherán como un importante éxito diplomático frente a los occidentales que intentan, según Irán, aislar al país en el plano internacional debido a su polémico programa nuclear.
Irán espera revitalizar esta organización que data de la guerra fría para converlirla en un contrapeso a las grandes potencias, principalmente a Estados Unidos.
Bajo el liderazgo de Teherán, se espera que esta cumbre condene las sanciones unilaterales impuestas por los países occidentales a varios miembros, entre ellos Irán, por su política nuclear o por violaciones de derechos humanos.
Igualmente, se espera que la cumbre retome algunos temas tradicionales del movimiento de los no alineados, como la "democratización" del Consejo de Seguridad de la ONU, el rechazo de toda injerencia en los asuntos interiores de los países miembros, el apoyo a la creación de un Estado palestino y el desarme nuclear.
Los principales países representados al más alto nivel son India (Manmohan Singh, primer ministro), Egipto (Mohamed Mursi, presidente), Pakistán (Asif Ali Zardari, presidente), Irak (Nouri al Maliki, primer ministro) y Siria (Waël al Halaqi, primer ministro).
La Autoridad palestina, que es uno de los 120 miembros del movimiento, está representada por su presidente Mahmud Abas.
El secretario general de la ONU, Ban Ki moon, y el secretario de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, asisten también a la cumbre.