Los malos resultados obtenidos en el inicio de este semestre no sólo le costaron la salida al cuerpo técnico de Darío Franco. En Azul Azul asumen que el plantel, tal como está conformado, está desbalanceado y por lo tanto se abren a incorporar a nuevos jugadores, especialmente, en delantera.

Además, consideran que el nuevo técnico (Marco Antonio Figueroa) tiene el derecho a realizar incorporaciones de su gusto al plantel.

Sin embargo, como la "U" tiene todos sus cupos de extranjeros llenos, en la concesionaria saben que primero deberán encontrarle una salida a alguno de los foráneos que están en el plantel.

Ya tienen camino avanzado, pues hay dos nombres que son observados de cerca por la dirigencia debido a sus bajos rendimientos. Ellos son Ezequiel Videla y Luciano Civelli, quienes arribaron en julio del año pasado por expreso pedido del actual entrenador de la selección chilena, Jorge Sampaoli, y que hasta hoy no han respondido a las expectativas.

Incluso, Civelli no ha jugado ninguno de los partidos de este semestre. Y Videla ha tenido pobres desempeño tanto en los compromisos amistosos como en la Copa Chile.

Además, en ambos casos, la posición que ocupan están sobrepobladas. Videla compite directamente con Sebastián Martínez, Charles Aránguiz y Juan Rodrigo Rojas. En el caso de Civelli, ya están César Cortés y Felipe Gallegos, sin contar que ahí puede jugar Gustavo Lorenzetti.

Aunque otros como Enzo Gutiérrez y Ramón Fernández tampoco han confirmado los antecedentes futbolísticos que les permitieron llegar a los azules a cambio de mucho dinero -US$ 2,6 millones por los dos- en la concesionaria creen que han sido mucho más aporte que Videla y Civelli.

"Entre los dos desembolsamos poco más de tres millones de dólares y desgraciadamente eso no se ha visto reflejado en la cancha. Es cierto que ambos han debido lidiar con graves lesiones, pero cuando estuvieron bien, tampoco gravitaron", sostiene uno de los hombres fuertes de Azul Azul, que reconoció que es materia de estudio la situación de los extranjeros.

En la sociedad anónima que maneja a la "U" tienen claro que el alto sueldo que reciben ambos futbolistas, U$ 25 mil, es un gran problema para encontrarle algún club. De hecho, ningún equipo en Chile está en condiciones de pagarles ese monto, por lo que Azul Azul debería hacerse cargo de buena parte de la remuneración de cada uno para facilitar su salida en calidad de préstamos.

Tanto a Civelli como a Videla aún les restan tres años de contrato, por lo que una rescisión del vínculo sería inabordable desde lo económico para el club. Y como nadie en este momento está dispuesto a pagar lo que la "U" desembolsó hace un año, la única vía es cederlo a otra institución.