Babymoon, la tendencia del último viaje en parejas antes de ser padres
<p>La modalidad es una especie de ritual de quienes buscan un descanso y prepararse para la futura vida de padres. Los destinos elegidos apuntan precisamente a eso: relajo, masajes y romanticismo. En Chile no abunda la oferta de programas para esta tendencia y se conoce más por el boca en boca.</p>
Con tres años de matrimonio, Isabel y Felipe programaron su última luna de miel. Así bautizaron el viaje, porque, según su plan, la campaña en la búsqueda del primer hijo tenía que dar resultados pronto. Y así fue. "La ida era 'encargar' a la Rafa en el viaje", cuenta Felipe. Pero Isabel tomó el avión con un par de meses de embarazo.
La idea de viajar antes de la llegada del primer hijo tiene nombre: babymoon. Es una modalidad que se instaló hace unos años en Estados Unidos y Europa, y que viene a ser como la última escapada en pareja antes de sumergirse en un mundo dominado por las mamaderas, los pañales y exiguas horas de sueño. En Chile, esta tendencia recién se asoma.
"Si me preguntabas hace dos años, no existía. Pero ahora llegan parejas en este plan. No son muchas, pero se van sumando con el tiempo", cuenta Zuria Martínez, ejecutiva de Falabella Viajes del Parque Arauco. "Es una tendencia que está muy presente en el boca en boca, pero falta darla a conocer", complementa Romina Hoces de la Guardia, ejecutiva de ventas de Carlson Wagonlit Travel, quien vio la tendencia en terreno cuando, en febrero pasado, fue a Punta Cana. "Vi una cantidad de embarazadas impresionante. Con guatitas y hasta seis meses de embarazo", cuenta. En agosto fue a México y se repitió la escena.
¿Qué buscan las parejas? Básicamente, descansar y prepararse para lo que viene. "Es muy saludable darles un ceremonial así a las nuevas etapas. De esa forma, se viven de manera más a concho", comenta Víctor Carvajal, sicólogo especialista en parejas. Al hacerlo en conjunto también se refuerza el compromiso de enfrentar juntos los próximos pasos.
LOS DESTINOS
Uno de los destinos que escogen para esta ocasión son los "all inclusive" de República Dominicana y México. Allí los hoteles están en la dinámica de segmentarse y existen programas para estas parejas.
"En las últimas dos temporadas se ha notado un incremento en los servicios especializados en los resorts y uno de los segmentos que ha crecido es el de las parejas que quieren viajes temáticos", dice Alvio Alvarez, director para Chile de los hoteles y resorts Sol Meliá. Para ellos, ofrecen masajes, cena romántica, cabalgatas y yoga especial para los primeros meses de embarazo.
Una semana en el Caribe mexicano cuesta unos US$ 1.200 por persona en temporada baja y US$$ 1.900 en alta.
El otro destino elegido son las termas. "Les garantizamos un momento de tranquilidad donde recuperan su energía y capacidad corporal", comenta Kees Aerts, gerente general de Termas de Puyehue, uno de los lugares que las parejas frecuentan para relajarse con las bondades como el spa jet, los masajes thai y las piedras calientes.
Lo importante, explica Víctor Carvajal, es que este viaje no se convierta en el último cuando en la casa sean tres o más. "Es un ritual, pero no puede ser una despedida para la vida en pareja. La complicidad no se puede perder con los hijos", concluye.
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