Hasta la Organización Mundial del Comercio (OMC) ubicada en Ginebra, Suiza, llegó la Presidenta Michelle Bachelet para participar en una sesión especial del Consejo General del organismo.
Tras reunirse con el director general de la OMC, Roberto Azevedo, la Mandataria intervino en una sesión especial del Consejo donde criticó las medidas proteccionistas que algunos países están implementando -como el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump- y la incertidumbre que generan.
"Nuestras economías en los últimos años se han visto afectadas por los bajos precios de las materias primas, la desigualdad, la inseguridad y la corrupción. A eso, se suma el auge de políticas proteccionistas en materia comercial por parte de algunos países", dijo la Mandataria.
"Se ha ido instalado progresivamente un discurso que intenta culpar al libre comercio del menor crecimiento económico y de la pérdida o poca creación de empleos. Se propicia así un neo-proteccionismo, especialmente en las naciones más desarrolladas, tentación a la que no escapan tampoco países en desarrollo. Se busca crear barreras, para impedir los intercambios, y presuntamente favorecer la producción nacional", acotó.
En esta línea, la Presidenta indicó que "estamos convencidos de que estas medidas no traen ni crecimiento ni bienestar. Además, el aislamiento y el proteccionismo ya no pueden hacer frente a la interdependencia productiva, comercial, tecnológica, académica y comunicacional. La globalización es una realidad irreversible. Lo que sí debemos hacer es corregir las desviaciones e inequidades, para que la globalización beneficie a todos".
En cuanto a los desafíos de la región, la jefa de Estado sostuvo que "sabemos que enfrentamos un punto de inflexión. Como región tenemos el desafío de fortalecer nuestras economías, seguir mejorando nuestro comercio intrarregional, que alcanza al 15% del total del comercio exterior de ella, y trabajar como bloque para hacer frente a las incertidumbres del contexto internacional".
"Frente a esos desafíos, la integración regional es clave para incorporarse al mundo y ser económicamente más competitivos. Para nuestros países no es una opción, es una necesidad. Por esto, hemos impulsado iniciativas para fortalecer los diferentes esquemas de integración que conviven en América Latina y el Caribe, como espacios de concertación y convergencia, de manera que la región se inserte competitivamente en el mundo", añadió.
En este contexto, la Mandataria aseveró que "en Viña del Mar, la Alianza del Pacífico decidió iniciar negociaciones comerciales con países del Asia Pacífico, que se traduzcan en acuerdos con altos estándares de calidad en materia de disciplinas comerciales y, que se concluyan en el corto plazo. En otras palabras, la Alianza del Pacífico como bloque será una plataforma alternativa para impulsar el comercio abierto en la región del Asia Pacífico".
Cabe destacar que una de las primeras medidas que adoptó Trump al asumir la Casa Blanca fue retirar a Estados Unidos del TPP, afectando a los otros países que conformaban el acuerdo.
En cuanto a la economía mundial, Bachelet indicó que "somos testigos de una grave desaceleración del comercio internacional, que en 2016 se expandió sólo en un 1,2%. Esto contrasta con un crecimiento económico mundial de 2,2% para el mismo período, que es el menor registrado desde 2009. Esta desaceleración es preocupante porque sabemos que el comercio internacional es fuente de creación de empleo y desarrollo económico".
"Si bien las proyecciones apuntan a una mejora en la actividad económica para 2017 y 2018, este crecimiento puede verse afectado por la incertidumbre política y vulnerabilidad financiera que amenaza a los mercados", manifestó la jefa de Estado.
En esta línea, precisó que ¨por otra parte, durante la última década, el comercio internacional ha presenciado un incremento sostenido de barreras para-arancelarias. Tenemos el desafío de eliminar las distorsiones y los obstáculos que afectan a la fluidez de los intercambios, sobre todo de los países en desarrollo y de los menos adelantados¨.
De esta manera, la jefa de Estado detalló: "Chile hoy cuenta con acuerdos con 64 mercados, que representan el 64,1% de la población mundial y el 86,3% del PIB global. Este proceso de apertura comercial ha derivado en mayor bienestar para nuestros ciudadanos. El PIB se ha septuplicado, el PIB per cápita ha crecido en la misma proporción, alcanzando actualmente 23 mil 500 dólares, la pobreza ha disminuido desde el 38,6% al 11,7% de la población, y la pobreza extrema hoy alcanza al 3,5% de nuestros ciudadanos. Asimismo, hemos logrado una disminución moderada, pero significativa, de la desigualdad en la distribución del ingreso, medida por Coeficiente de Gini" .
Asimismo, destacó que "hemos acompañado esta apertura y el crecimiento con políticas públicas destinadas a mejorar el bienestar de nuestros ciudadanos. Estas no habrían sido financiadas sin el dinamismo de nuestro comercio exterior amparado en acuerdos comerciales y en las reglas de la OMC. Por otro lado, Chile está comprometido con la liberalización de los mercados, resguardando el principio de trato especial y diferenciado".