Durante la entrega de un conjunto de viviendas sociales en la comuna de El Monte, un comentario de una pobladora identificó a Michelle Bachelet. La dirigenta Maritza Barahona le mencionó las dificultades que enfrentó en su momento, por la desconfianza que existía, para poder organizar a los vecinos en torno al proyecto habitacional.

La Mandataria citó el comentario en su discurso, donde hizo una analogía entre su gobierno y el proceso que culminó en la edificación del nuevo barrio. "Me decía Maritza algo que yo entiendo muy bien, porque también me pasó a mí. Al comienzo no hubo confianza, había gente que no creía y probablemente no hubo confianza en las dirigentas tampoco, hasta que al final lo demostraron. Créanme que sé de lo que están hablando. Cuando partí en el gobierno muy pocos confiaban en que yo era capaz de hacerlo", dijo la Presidenta.

Si bien inmediatamente precisó que en realidad sería injusto decir que fueron pocos, "porque todos los que habían votado por mí confiaban", Bachelet reiteró el tema de fondo de su desahogo. "Obviamente, había un grupo de chilenos que no confiaba y  se equivocaron", agregó.

Según señalan en Palacio, las improvisadas palabras de la Mandataria reflejaban una mezcla de sentimientos que hoy existe en gran parte del gobierno a menos de tres meses de que termine el mandato. Por un lado, satisfacción de que exista un respaldo cercano al 80% de la Mandataria y, por otro, extrañeza de que los mismos que criticaban al gobierno, hoy se vuelcan en elogios.

Incluso, algunas autoridades de La Moneda bromean por lo atípica que ha sido la campaña, en la que los dos candidatos en carrera, Eduardo Frei y Sebastián Piñera, señalan que continuarán con las políticas públicas de la Presidenta y han recurrido a su imagen en la gráfica de campaña.

A inicios del mandato de Bachelet, ambos abanderados habían tenido una postura crítica al gobierno.

Incluso, Frei en febrero de 2004, en momentos en que la entonces ministra de Defensa asomaba como presidenciable, dijo que el país no estaba preparado para una mujer Presidenta. Luego, en 2006 fue crítico a la política de austeridad fiscal impulsada por el ministro Andrés Velasco y en 2007 fue un fuerte detractor de las iniciativas para mejorar Transantiago.

A su vez, en los primeros años de la administración bacheletista, afectada por las protestas escolares y el plan de transporte capitalino, Piñera cuestionaba las improvisaciones y la falta de claridad en el programa de gobierno.