Unas manos sobre los barrotes de una celda es el motivo de uno de los cuadros más preciados por la Presidenta Michelle Bachelet. La obra, realizada en una placa de cobre, es uno de la serie de trabajos que realizó el general Alberto Bachelet Martínez en su paso por la celda 12 del patio N° 2 de la Cárcel Pública de Santiago.

La idea de la Mandataria, según explican en el gobierno, es donar el cuadro al Museo de la Memoria, que será inaugurado en diciembre como una de las obras más simbólicas de su gobierno.

En La Moneda explican que el museo pretende ser un espacio de reflexión sobre las violaciones de DDHH entre 1973 y 1990, un lugar para dignificar a las víctimas y ser el depositario de toda obra o documento que recuerde aquellos años.

El material del museo está siendo recolectado a partir de donaciones de instituciones y personas naturales. Hasta el momento se han recibido 10 mil unidades documentales, entre ellas artesanías y escritos de presos, fotos, periódicos, grabaciones radiales y documentos jurídicos.

Entre estos últimos figuran decretos de expulsión, actas de consejos de guerra, circulares para controlar a los disidentes en el exterior y otros oficios reservados. Algunos de estos papeles firmados por Augusto Pinochet o Manuel Contreras. También hay una donación de archivos desclasificados de la CIA.

Entre las primeras autoridades que han realizado donaciones figura el ministro José Antonio Viera-Gallo, quien entregó algunas revistas, además de la madre de la vocera Carolina Tohá, conocida como Moy de Tohá, quien donó varios objetos.