Su primera señal de respaldo a la realización del ejercicio de fuerzas áreas Salitre 2009 realizó ayer la Presidenta Michelle Bachelet desde que Perú cuestionara que la hipótesis original de las maniobras tenía similitudes con el diferendo marítimo que se ventila en la Corte de La Haya.
El actual libreto simula una isla, donde irrumpe un ficticio líder rebelde que obliga intervenir a la ONU.
"Este ejercicio tiene como objetivo lo mismo que muchas otras iniciativas, en las que estamos convencidos que la integración y la transparencia son el mejor camino para garantizar la paz", dijo Bachelet, quien envió un saludo a los efectivos de Chile, Argentina, Brasil, EE.UU. y Francia que participan en el ejercicio. Además, agradeció la presencia de observadores de México, Ecuador, Venezuela y Bolivia.
Ayer, el ministro de Defensa, Francisco Vidal, dijo que se "está evaluando" la asistencia de la Presidenta, quien fue invitada por la Fach para el día 28 de octubre. Pese a que en el entorno presidencial descartaron la presencia de Bachelet, fuentes castrenses comentaron que sería importante la concurrencia de la Jefa de Estado como señal política.