A partir del mediodía de ayer, en La Moneda se comenzaron a preparar las instalaciones del Salón Montt Varas, lugar donde se desarrollan las cenas oficiales en Palacio, para recibir a los 21 ministros de la Corte Suprema, quienes hace más de un mes fueron invitados por la Presidenta Michelle Bachelet a un encuentro de carácter protocolar.
Cerca de las 19.30 horas, los distintos jueces comenzaron a llegar hasta la casa de gobierno junto a sus respectivas parejas, a un encuentro que tenía programado recibir a 40 personas y donde también participó el ministro de Justicia, José Antonio Gómez.
A su llegada, el titular de Justicia dijo que "la Presidenta siempre ha señalado que las relaciones institucionales entre poderes del Estado tienen que ser cordiales y tienen que ser, además, dentro del ámbito de cada cual".
Lo propio hizo el presidente de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, quien a su llegada a La Moneda aseguró que "es una invitación de carácter republicano para conocernos, tener algún acercamiento, compartir inquietudes mutuas".
Este no es el primer acercamiento entre el gobierno y el Poder Judicial. El pasado 8 de enero, Muñoz llegó hasta el ex comando presidencial de calle Tegualda para entregarle a la entonces mandataria electa el saludo protocolar de la Corte Suprema, luego de su triunfo en las urnas.
Los saludos no quedaron ahí. Una vez instalada en La Moneda, Bachelet recibió a Muñoz en el salón de audiencias de Palacio.
GIRO EN LA RELACIÓN
Ambos gestos de saludo a Bachelet marcaron en su momento un importante punto de diferenciación respecto de la relación del ex Presidente Sebastián Piñera con el Poder Judicial.
De hecho, en 2010, una vez electo, el entonces presidente de la Corte Suprema, Milton Juica, optó por no ir a felicitarlo, sino esperar hasta su llegada a La Moneda. En ese momento aseguró: "Yo, como representante del Poder Judicial, no como Milton Juica, tengo que resguardar de manera absoluta la independencia del Poder Judicial, y de eso no puede quedar ninguna duda frente a la sociedad".
La relación del ex mandatario con las autoridades judiciales, durante sus cuatro años de gobierno, estuvo marcada por una constante tensión.
En diversas ocasiones, el ex mandatario realizó críticas a la gestión de los jueces. Por ejemplo, tras las manifestaciones registradas en 2013, durante la conmemoración del 11 de septiembre, y luego de que 246 detenidos fueran dejados en libertad, aseguró que "los jueces de garantía no han aplicado la ley con el rigor que se requiere, ni han establecido las medidas cautelares que la situación ameritaba".
El último episodio de Piñera con el actual presidente de la Corte Suprema se registró a inicios de marzo de este año, cuando junto a su ministro del Interior, Andrés Chadwick, aseguraron que "aspiraban a una pena mayor" tras la entrega del fallo en contra de Celestino Córdova, por la muerte del matrimonio Luchsinger Mackay.
Durante la inauguración del año judicial, Muñoz les respondió al ex mandatario y ex ministro, asegurando que "no está a la altura de la autoridad emitir pronunciamientos descalificatorios de lo que puede ser la función jurisdiccional. Este espectáculo lo observamos en Chile y en otros lugares que se califican de repúblicas bananeras o caribeñas, con todo respeto de estas repúblicas".
Al ser consultado respecto de la nueva relación que se busca establecer entre el gobierno y el Poder Judicial, el ministro Gómez aseguró: "Por supuesto que marca una diferencia con lo que fueron las relaciones institucionales en el gobierno anterior. Nosotros nos hemos preocupado de tener una relación de trabajo, de buscar fórmulas de avanzar con proyectos de ley que al Poder Judicial le importan".