"Dejen a mi hija tranquila porque ella no tiene nada que ver con esto". Estas fueron las duras palabras con las que la Presidenta Michelle Bachelet respondió a las críticas por los terrenos que posee su hija menor Sofía Henríquez a 12 kilómetros de proyecto minero Dominga.
Luego de que La Tercera publicara que el pasado 24 de marzo de 2014, trece días después de que Bachelet iniciara su segundo gobierno, la estudiante de psicología adquirió un terreno en la comuna de La Higuera, IV Región, de 5.000 metros cuadrados por $ 6.500.000 -monto que fue "pagado al contado"- la Mandataria precisó que fue ella quien pagó el terreno a través de la gestión de su nuera Natalia Compagnon.
"Algo ha pasado en Chile que transforman cosas normales como que fueran delitos. El año 2013 yo conocí a una enfermera que tiene un centro de meditación y me contó de este lugar en La Higuera y donde la familia de mi hijo también estaba interesado en comprar algo como una cosa recreativa, y yo decidí entonces comprarle algo a mis hijas y que yo financié, yo la pagué", señaló la Presidenta.
"A mí al región me encanta, es un lugar tranquilo, pensando para algo familiar en el futuro, y no hay ninguna otra cosa extraña (...) Mis hijas ni siquiera sabían, fue una decisión mía que yo tomé para dejarle algo para el futuro a ellas. Y por supuesto que no tiene nada que ver con Dominga, yo ni siquiera sabía que existía a esa altura un proyecto minero. Además o imaginaba, hasta que vi las fotos en los diarios, que los proyectos mineros se hacen en la cordillera, no en la zona que yo pensaba que era al borde de la playa", añadió Bachelet.
En este contexto, la Mandataria aseveró que "mi hija está súper afectada personalmente por algo que no es ni de su responsabilidad, que ella no quería y que yo tomé esa decisión. Esto no es negocio".
"Es verdad que ella tiene a su nombre un terreno pero que yo lo compré y lo puse a nombre de mis hijas", reiteró la Presidenta.
Sobre la participación de Natalia Compagnon en la compra del terreno, Bachelet sostuvo que "yo le dije a la enfermera que yo estaba interesada en ese terreno, entonces Natalia hizo el trámite, compró y después yo le pasé la plata y se traspasó a nombre de mis hijas, porque yo quería que mis hijas pudieran tener algo al lado de mis nietos. Ella lo compró porque ella tenía el nexo con la enfermera y yo la conocí a ella en su casa. Son detalles que francamente no tienen nada que ver".
Finalmente, la jefa de Estado indicó que acá "evidentemente que aquí ha habido mala intención" y llamó a "levantar la mirada, tengamos estatura y no caigamos en mezquinas cosas".
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