Para mañana a primera hora y poco antes de que se dé inicio a la Cumbre de Presidentes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Presidenta Michelle Bachelet y el mandatario boliviano, Evo Morales, deberían concretar una reunión bilateral en Bariloche, Argentina.
Aunque según fuentes de ambas cancillerías la cita bilateral habría sido solicitada por La Paz, la petición fue recibida con entusiasmo en Santiago, donde ven en el encuentro la oportunidad de dar una señal de unidad entre ambos gobiernos tras las declaraciones del Presidente peruano, Alan García, en las que sugirió que Chile y Bolivia tenían un acuerdo "bajo la mesa" en el tema marítimo.
En la Cancillería chilena estiman que con sus dichos, el mandatario limeño buscó abrir una fisura en las relaciones entre Santiago y La Paz, forzando a Morales a dar explicaciones internas sobre el estado de las negociaciones en un año electoral y enfrentarlo a Chile, por no haber alcanzado aún un acuerdo sobre la salida al mar del país altiplánico.
De hecho, el canciller peruano, José Antonio García Belaunde, ironizó ayer sobre la posibilidad de que las conversaciones por el tema tengan resultados.
Por eso, en Santiago consideran importante que con el encuentro de mañana, Bachelet y Morales den una señal de que la relación entre ambos países no se ha quebrado.
En la cita, afirman en la Cancillería chilena, se podría oficializar la postergación del acuerdo por el río Silala (uno de los 13 puntos de la agenda de conversaciones entre Bolivia y Santiago por temas bilaterales, que se inició el 2006 y a la que aludió García). Sin embargo, agregan que la mejor muestra de que la negociación se mantiene en otros puntos es que en estos días se reúne en La Paz el comité fronterizo bilateral.
El gesto de mañana adquiere mayor relevancia, luego de que el martes, García volviera a arremeter en el tema, afirmando que Chile y Bolivia debían explicar, en la cita de Unasur, "de qué se tratan" las conversaciones entre ambos países.
Esto, pese a que la cumbre en Argentina fue citada paa tratar la presencia de militares estadounidenses en bases colombianas.
SANTIAGO ACUSA INTERVENCION
Anoche, en TVN, el canciller chileno, Mariano Fernández, responsabilizó a Alan García de provocar el impasse, de "poner cuesta arriba" la relación en temas "creativos" que vayan más allá de lo comercial entre ambos países, e informó que expresó su molestia a Lima, a través del embajador peruano en Chile, Carlos Pareja.
"Se hizo un llamado al embajador peruano para manifestarle nuestra molestia, por el canal diplomático, como corresponde", dijo.
En la mañana, Fernández se había reunido con el embajador chileno en Lima, Favio Vío, tras lo cual acusó al gobierno peruano de "intromisión" en asuntos bilaterales de Chile (ver frase) y dijo que la agenda de los 13 puntos no era un tema secreto sino conocido.
Además, dijo que le sorprendía que García aludiera a antiguos intereses peruanos en el tema, lo que a su juicio sólo tenía que ver con "nostalgia".