Quisieron estar presentes y ganarla. Para darle un final a sus carreras o el impulso necesario para llevarlas al estrellato. No la miraron por debajo. No la despreciaron. La jugaron y se convirtieron en leyendas de la Copa Confederaciones.
Batistuta
Goleador histórico de la selección argentina hasta 2016, cuando sus 54 goles fueron superados por Lionel Messi. Militando en la Fiorentina, lideró el equipo transandino que obtuvo su primera y única Copa Confederaciones, que en aquel entonces se denominaba Copa Rey Fahd. Sergio Goycochea, Diego Simeone y Leonardo Rodríguez lo acompañaron en la consecución del trofeo, en cuya final vencieron a Arabia Saudita por 1-3.
Michael Laudrup
Una de las estrellas del fútbol europeo en la década de los 80. El mediapunta danés se dio el lujo de jugar para el Barcelona y el Real Madrid, donde fue compañero de Iván Zamorano. De abundante y prolijo regate, se destacó por suspases "sin mirar", que llevó por montones a la copa de 1995 que ganaría Dinamarca.
Romario y Ronaldo
Durante 1997 tomó forma una dupla efímera, pero letal. Que combinaba el control que ofrece la experiencia con el arrebato de la juventud. Romario y Ronaldo conseguirían ese año la Copa América y la Confederaciones, que por primera vez tenía ocho participantes. Una clara muestra de lo que la dupla "Ro-Ro" podía hacer fue la final del torneo, en donde golearon 6-0 a Australia, con sendos hat-tricks de los atacantes brasileños.
El dúo no pudo repetir su brillantez en el Mundial de Francia '98 debido a una lesión de O Baixinho, privando al mundo de ver a dos de los mejores delanteros de la historia, juntos otra vez.
Ronaldinho
Corría 1999 y un jugador de expresiones cándidas, risa fácil y calidad desmesurada, debutaba con la selección de Brasil. Al hacerlo conseguía la Copa América y ser goleador de la Confederaciones de aquel año, aunque perderían la final de esta última contra México. No obstante, el resultado pasaba a un segundo plano, ya que una leyenda comenzaba a surgir: Ronaldinho. El astro brasileño conseguiría el trofeo en 2005, convirtiéndose en el máximo goleador histórico, con nueve tantos.
Robert Pirès
En 2001 la Copa resentiría una importante ausencia: Zinedine Zidane. No obstante, el relevo lo tomó Robert Pirès, quien comandó a Francia a la primera Confederaciones de su historia. La estrella que en ese momento vestía la camiseta del Arsenal, resultó elegido como mejor jugador del torneo.
Thierry Henry
Francia obtendría su segundo trofeo consecutivo de la mano de Thierry Henry. El delantero galo, quien brillaba con los Gunners en Inglaterra, consolidaba su nivel de estrella con esta nueva copa. Fue elegido mejor jugador y se alzaría como máximo goleador de esa versión, con cuatro conquistas.
Adriano
La renovación en la delantera brasileña parecía llegar con Adriano. El ariete ofrecía potencia, presencia y definición; atributos añorados ávidamente por la Canarinha. Brasil alzaría su segunda Confederaciones en 2005, con El Emperador como principal destacado. Anotó cinco goles, fue la figura del certamen y una carrera de éxitos comenzaba a despegar... sólo para caer al poco tiempo.
Kaká
La Copa Confederaciones ahora se jugaba cada cuatro años. Era 2009 y Kaká llegaba al torneo como flamante refuerzo del Real Madrid de Manuel Pellegrini. Poseía una carrera llena de éxitos con el Milan y Brasil, con el que buscaba su segunda copa consecutiva. Y lo logró derrotando a Estados Unidos en la final. Era el principio del fin para la calidad del paulista, quien decayó debido a las lesiones.
Neymar
Es el bastión de la Verdeamarela. En quien confían para que los regrese de nuevo a la cima. Brasil, que organizaba el Mundial del año siguiente, acogió en 2013 la Confederaciones. Y se encargó de enviar un mensaje claro: nadie vendría a ganarles a su casa. Lo demostraron ganándole a España 3-0 en la final, siendo Neymar la figura. Sin embargo, no lo pudieron demostrar en la cita planetaria.