Dos caras exhibe la caída del dólar. Aunque los exportadores se han visto golpeados por la baja del tipo de cambio, los consumidores serán beneficiados porque podrán acceder a productos importados más baratos, especialmente, quienes quieran comprar o renovar sus vehículos. "Todas las variaciones del dólar se traspasan casi inmediatamente al precio final de los vehículos y en igual proporción", dice Iván Silva, vicepresidente ejecutivo de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (Anac). Y pone fecha probable para el inicio de esas rebajas: julio.
La divisa norteamericana tuvo ayer su tercer retroceso consecutivo y cerró en $538,3, su menor nivel desde el 25 de septiembre de 2008. Con ello, acumula en el año una baja de $103,2 (-16,09%).
En la industria automotriz el traspaso a los clientes de la reducción se hará, en la mayoría de los casos, a través de bonos de descuento al valor del auto, "que permiten a las automotoras adaptarse rápidamente al nuevo escenario del dólar", indica Silva. Sin embargo, no todas las marcas aplicarán rebajas. "Hay una parte importante del mercado, entre un 40% y 50%, que son marcas de origen coreano, japonés y europeo, cuyos modelos no se transan en dólares, aunque de alguna manera también buscan ajustes en relación al dólar internacional", afirma Silva.
La baja del dólar tendrá otro efecto positivo para los automovilistas: atenuará el aumento de las bencinas que se esperan para las próximas semanas. Expertos estiman que por cada peso que baja el tipo de cambio, la bencina cae $ 0,7.
La baja de la divisa beneficiaría a viajeros y aún hay dudas del efecto en las importaciones.
INQUIETUD EN LOS PRIVADOS
La baja del dólar no causa igual interés en los exportadores. El presidente de la Asociación de Exportadores (Asoex), Ronald Bown, dijo que "la autoridad está empujando más allá de lo prudente el tipo de cambio. Hay otras opciones de endeudamiento, como hacerlo en pesos".
El titular de Vinos de Chile, René Merino, comentó que "para que el sector sea competitivo el dólar tiene que estar por sobre los $600, pero ahora de nuevo vamos al despeñadero". Merino recuerda que en 2008 desaparecieron tres viñas. "Si el dólar sigue cayendo para las viñas que están con problemas será el tiro de gracia".
Los industriales tampoco están tranquilos. El presidente de la Sofofa, Andrés Concha, pide cambios al Ejecutivo. "Estamos solicitando al gobierno que, en la medida de lo posible, el mecanismo de financiamiento del déficit no sea por la vía de vender dólares en el mercado".
Agregó: "Tenemos confianza en las autoridades tanto de Hacienda como del Banco Central, y sabemos que ellos van a hacer los mejores esfuerzos por tratar de arbitrar al menor costo posible este problema que existe, por una parte, con un dólar muy bajo y, por otra, con tasas de interés de largo plazo que se han mostrado reticentes a caer".