El Banco Central Europeo (BCE) dejó este jueves sin cambios su principal tasa de interés en un mínimo histórico de 0,25%, manteniendo su curso pese a una persistente debilidad de los precios en la zona euro que ha alentado los temores a una deflación.
La decisión de mantener la tasa era ampliamente esperada, porque el banco anticipa que la inflación gradualmente se acelerará hacia su objetivo de algo menos del 2%.
No obstante, el banco está preocupado de que la inflación se estanque en "una zona peligrosa" bajo el 1%.
El BCE había bajado su tasa de interés de referencia en noviembre, luego que la inflación cayó a un 0,7% en octubre.Y en diciembre la inflación fue de un 0,8%.
Los mercados pondrán atención ahora a los comentarios del presidente del BCE, Mario Draghi, que ofrecerá una rueda de prensa a las 13.30 GMT.