En medio de la discusión que se ha dado en las últimas semanas respecto a un eventual incubamiento de una burbuja inmobiliaria en el país, el Informe de Estabilidad Financiera (IEF) del segundo semestre de 2012 que presentó hoy el Consejo del Banco Central ante la Comisión de Hacienda del Senado, sostiene que es necesario monitorear la evolución del sector.

El documento indica que los índices agregados de precios de vivienda mantienen su ritmo de expansión, en línea con el dinamismo de la economía y que en un mayor número de comunas los precios crecen a tasas superiores a las históricas.

Estas alzas se dan en un contexto de alto crecimiento de la demanda de viviendas y una significativa expansión de la actividad en el sector, agrega.

Las empresas del sector muestran un mayor nivel de endeudamiento y es probable una aceleración del crédito hipotecario en el mediano plazo. La evolución de estos elementos podría llevar a la gestación de vulnerabilidades financieras en el sector inmobiliario y constructor, o en los hogares demandantes de viviendas, añade.

El segundo desarrollo que requiere monitoreo, según el informe es la evolución de la banca mediana (bancos que tienen participación de mercado menor a 10% y se excluyen bancos de tesorería y de algunos retailers).

"La mayor expansión de bancos de tamaño medio respecto de los de mayor tamaño en todos los segmentos de créditos tiene aspectos positivos. Sin embargo, la dinámica de crecimiento podría llegar a ser una fuente de vulnerabilidades. Dentro de este desarrollo un primer riesgo a monitorear en cuanto a este crecimiento es su mayor exposición a sectores cíclicos y a deudores individuales", dice el informe.

Agrega que ante un deterioro de la demanda interna, como el que podría materializarse en el escenario de riesgo, el impacto sería mayor.

"Un segundo factor a monitorear es el mayor crecimiento relativo de créditos rotativos de consumo (tarjetas de crédito). Esto por la posible subestimación de riesgo que podrían generar estos productos. Por último, la mayor dependencia de financiamiento mayorista de bancos medianos, los hace más vulnerables a eventos de fondeo", advierte el IEF.

SECTOR EXTERNO

La vulnerabilidad macrofinanciera en la Eurozona sigue latente y constituye el principal riesgo externo para el sistema financiero chileno, advierte el Informe.

Sostiene que en caso de agudizarse la situación en Europa, el deterioro de las condiciones financieras externas y la consecuente desaceleración mundial tendrían un impacto negativo en la economía chilena.

El IEF dice que en Chile el sistema financiero ha operado con normalidad, esto en un contexto de alto dinamismo de la inversión y favorables condiciones de financiamiento externo. El crédito agregado crece en línea con el ingreso de las familias y la actividad económica.

Respecto de la solvencia del sistema, señala que los ejercicios de tensión realizados a la banca muestran que los niveles actuales de capitalización permitirían absorber un episodio caracterizado por una desaceleración del PIB, un aumento del costo de financiamiento y una depreciación del tipo de cambio, congruente con la materialización del escenario de riesgo externo.

En cuanto a los hogares, el informe muestra que la deuda total ha aumentado en línea con su ingreso disponible, lo cual se ha traducido en indicadores de endeudamiento relativamente estables, ya sea que se compare el nivel de deuda o la carga financiera con el ingreso disponible o con la masa salarial.

En la deuda de consumo se mantiene el menor dinamismo de los oferentes no bancarios, con una mayor penetración en hogares de menores ingresos. Este menor dinamismo y el deterioro, en el margen, del comportamiento de pago son consistentes con políticas crediticias más conservadoras.

Por su parte, la deuda de las empresas ha crecido algo por sobre el PIB, crecimiento que ha sido impulsado por el dinamismo del crédito bancario doméstico y el financiamiento externo vía bonos.

Las colocaciones totales del sistema bancario crecen a un promedio de 11% real anual desde el último informe. Las mayores tasas de expansión se observan en las colocaciones comerciales.

El informe menciona que la rentabilidad de la banca ha disminuido durante 2012, como consecuencia de menores márgenes de intermediación y un mayor gasto en provisiones por riesgo de crédito.