Un crecimiento de 4,2% para la economía chilena en 2013 y de entre 3,75% y 4,75% para el próximo año es lo que proyecta el Banco Central en su último Informe de Política Monetaria (Ipom).

En el informe presentado en septiembre la entidad había pronosticado una expansión de 4%-4,5% para este año y de entre 4% y 5% para 2014. La Ley de Presupuesto diseñada por el Ministerio de Hacienda, en tanto, estima un crecimiento del PIB de 4,9% para el próximo año.

En el documento presentado esta mañana por el consejo del instituto emisor ante la Comisión de Hacienda del Senado, se proyecta también una inflación de 2,6% a diciembre de este año y de 2,5% hacia el final de 2014.

El Ipom señala que durante este año y de acuerdo con lo esperado, la actividad y el gasto han moderado paulatinamente su dinamismo y que esto se ha extendido a todos los componentes de la demanda interna.

Añade que el menor crecimiento de la economía ha permitido reducir las presiones acumuladas sobre el uso de recursos internos y el déficit de la cuenta corriente.

Respecto a la inflación sostiene que ha seguido en niveles bajos y las expectativas a dos años plazo permanecen en torno a 3% anual.

El escenario base del Ipom estima que en 2014 la formación bruta de capital fijo (inversión) crecerá a una tasa anual similar a la de este año. También que el consumo moderará su crecimiento respecto de 2013, teniendo en cuenta que, por un lado, se dará una moderación de la expansión del ingreso privado y que la depreciación cambiaria afectará al consumo de bienes durables. Por otro lado, las expectativas y un mercado laboral fuerte, aunque algo menos estrecho que este año, seguirán sustentando el consumo.

La proyección de crecimiento económico para 2014 considera un impulso externo similar al de septiembre y prevé que una parte de la reciente desacumulación de inventarios se recuperará en los trimestres venideros.

En tanto, se prevé un déficit de la cuenta corriente inferior al que se consideró en septiembre, llegando a 3,2% del PIB en este año y 3,7% en el próximo. Agrega que se atenúa el riesgo asociado a la evolución de la cuenta corriente que se había identificado en los últimos informes de política monetaria.

En cuanto a la tasa de política monetaria, el escenario base del Ipom utiliza como supuesto metodológico de trabajo que la tasa seguirá una trayectoria similar a la que muestra la última Encuesta de Expectativas Económicas.

Sostiene, además, que el tipo de cambio real está en niveles similares a su promedio histórico y se estima que está dentro de los rangos coherentes con sus fundamentos de largo plazo. Añade que la reciente depreciación del peso es parte del proceso de recomposición de las fuentes de crecimiento que debe acompañar al cambio en el entono económico.

SECTOR EXTERNO

Respecto al sector externo señala que los precios de las materias primas han disminuido, así como amainaron las tensiones geopolíticas en Medio Oriente, al igual que algunas dificultades de refinación en Estados Unidos, lo que redundó en registros efectivos y proyecciones de precios de los combustibles inferiores a los de septiembre.

Prevé que los socios comerciales de Chile tendrán tasas de crecimiento de 3,6% y 3,8% para el 2014 y el 2015, respectivamente.

RIESGOS

El Banco Central sostiene que el balance de riesgos para la actividad y para la inflación está equilibrado.

Sin embargo, en el plano externo el primer riesgo se relaciona con la evolución del crecimiento de las economías emergentes, en particular de China.

También se mencionan efectos de un eventual proceso de retiro de los estímulos monetarios en Estados Unidos, que no estará exento de tensiones. En ese sentido, un riesgo importante también tiene relación con sus efectos en algunas de las grandes economías emergentes que han acumulado algunos desequilibrios macroeconómicos y son más dependientes de del financiamiento externo.

En el plano local, el Ipom menciona como riesgo la posibilidad de una nueva postergación de la convergencia de la inflación a la meta de 3%.