Un grupo de diez individuos, integrado por seis chilenos, tres peruanos y una colombiana, fueron detenidos anoche en operaciones simultáneas de efectivos de la Brigada Contra en el Crimen Organizado, Brico, de la PDI, en Lampa y Peñalolén, acusados de introducir en el país cocaína de alta pureza, la que era comercializada en la Región Metropolitana.
El subjefe de la Brico, subprefecto Alfredo Roco, dijo a Agencia ORBE que la captura de los traficantes se logró después de una investigación de cuatro meses, de acuerdo a una coordinación con la Fiscalía Metropolitana Sur.
El grupo liderado por el chileno S.B.F., de 33 años de edad, obtenía la droga desde Perú y de una proveedora del mismo país, R.A.C., de 28 años, con residencia en la capital.
En el caso de la cocaína traída desde el norte del país, se contaba con la participación de correos humanos, los que evacuaban los ovoides del estupefaciente en una parcela arrendada en Lampa, con el fin de evitar las sospechosas surgidas de la circulación de personas extranjeras, en su mayoría peruanos.
El cabecilla de la organización, quien convive con una mujer colombiana, también detenida en la operación denominada "Ajedrecista" por el tipo de estructuración, tenía en Santiago el centro de operaciones y distribución en la residencia de la madre del hombre, en la comuna de Peñalolén.
Al momento de los allanamientos y detenciones, se encontró 2 kilos 500 gramos de clorhidrato de cocaína fina, sin tratamiento para aumentar su volumen, lo que eleva su avalúo a unos 25 millones de pesos.
Los capturados por la PDI están a la espera de la decisión del fiscal de ser formalizados este viernes o mañana sábado, que en el último caso implica una ampliación para sumar otros antecedentes de las indagaciones.
