"Emociona al ver la grandeza de los dirigentes cuando tienen que reconocer que deben entregar el sitial a otro", dijo Bárbara Figueroa, la próxima presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), ante el reconocimiento de su triunfo por parte de Arturo Martínez. En entrevista a 24 Horas, recalcó que más que un símbolo, ese gesto "va a marcar los procesos de unidad que se van a gestar en la base".

Reconoció los logros de la anterior dirigencia de la CUT, diciendo que aunque "el sindicalismo ha tenido momentos de alza", el cambio que se requería y que fue avalado por las bases, se refería a una mayor sistematización en los avances, y no solo hitos como fue la elaboración de la agenda social de los trabajadores.

"Acá los trabajadores han dicho queremos un cambio, pero también queremos que sea con responsabilidad, madurez y con mucha unidad" dijo.

Para la dirigente PC, la unidad será fundamental, la que se conjugará en torno a las convergencias programáticas, y a "propuestas sólidas y proyectos de ley alternativos", para desmentir acusaciones de ser más contestatarios que propositivos.

Explicó que buscarán avanzar hacia el millón de afiliados, y tener un congreso con todas las organizaciones (de trabajadores), estén afiliadas a la CUT o no, para poder "incidir en las demandas nacionales e históricas de los trabajadores".

EL CAMINO DE LAS MOVILIZACIONES Y EL DIÁLOGO

Bárbara explicó que no basta el diálogo para lograr sus demandas, aduciendo "la presión del gran empresariado y la de algunos bloques políticos, que es lo que ha impedido que nuestras demandas avancen... tiene el control económico y los medios". Por lo mismo, expresó que la movilización y el derecho a huelga son herramientas fundamentales para presionar.

"Tenemos que garantizar mucha rigurosidad en propuestas y argumentos", dijo, pero recalcó también la importancia de la movilización porque no cree que tengan otras garantías para poder conseguir sus objetivos, ejemplificando lo que ha pasado con los estudiantes, especialmente cuando se habla de "las grandes demandas de la gran mayoría del país".

Con confianza, expresó que "la CUT va a ser más incidente, eso yo lo puedo garantizar". Cuando asuma, Bárbara Figueroa será la primera mujer dirigiendo la CUT en Chile, y según ella dice, aparentemente sería la primera en hacerlo a nivel latinoamericano.