En lo que fue un espectáculo total, Barcelona superó por 4-3 al Real Madrid en el derbi español con una tripleta de Lionel Messi. La victoria vuelve a encaminar a los catalanes en La Liga, que tiene una apretada lucha por los primeros puestos.
No por nada es el clásico que más atención captura en el mundo. Los dos clubes más grandes de España se dieron cita en el Santiago Bernabeu para medirse en lo que era un duelo clave para el desarrollo de La Liga. Y estuvieron a la altura, porque se ofreció un espectaculo de gran calidad, con goles, lujos y polémicas que cuajaron un más que atractivo partido en la jornada de fútbol de día domingo.
El duelo de la fecha 29 del torneo hispano fue de alta intensidad y los equipos se disputaron con fiereza el protagonismo. El que entró mejor parado al campo fue el visitante, pues aprovechó un letargo "merengue" para imponer su juego, combinar con pases cortos, y buscar espacios en el vacío. Con esa fórmula, Andrés Iniesta anotó la apertura de la cuenta en los 8' tras un pase filtrado de Lionel Messi por la izquierda. De un zurdazo imparable, el español puso el 0-1.
E iban a tener más opciones. Neymar y el propio Messi tuvieron ocasiones para alargar la cuenta, pero fallaron increíblemente dentro del área. El exceso de confianza pasó la cuenta, porque en una aventura aislada de Angel Di Maria, Barcelona evidenciaría todas sus falencias defensivas. El argentino buscó a Karim Benzema con un centro de la línea de fondo, y el francés cabeceó casi sin resistencia para despertar a todo su equipo con veinte minutos en el reloj. El Madrid crecía y presionaba en campo contrario por los sectores de la cancha que más le dolían a los catalanes.
El tándem Di María-Benzema repetiría cuatro minutos más tarde, y el local se adelantaba en el marcador con un remate a quemarropa del seleccionado galo en los 24'. Javier Mascherano, otra vez, aparecía como villano, errando en la cobertura, y permitiendo con demasiada facilidad la entrada de blancos en área propia.
Era el momento de la "Casa Blanca", que se notaba cómodo en cancha, mucho más encendido que su rival. En eso estaban, disfrutando, cuando Lionel Messi apareció como solo lo hacen los grandes para meter de nuevo al cuadro "culé" en el partido. Pared dentro del área con Neymar, y la definición sobria y precisa del astro argentino en el minuto 41.
HORA DE LAS POLÉMICAS
Así era el partido. Gol tras gol, estocada tras estocada. Y si faltaban las polémicas, estas iban a llegar en el segundo tiempo. El árbitro cobró un penal para cada lado (55' para el local y 65' para la visita), por infracciones de Dani Alves sobre Cristiano, y Sergio Ramos sobre Neymar. El primero pareció ser fuera del área, y el segundo, con expulsión para el defensor, fue muy sútil. Decisiones correctas o no, los referentes de cada equipo, Cristiano Ronaldo y Messi, cambiaron por gol para dejar el marcador 3 a 3.
Alexis Sánchez ingresó en los 78', cuando el Madrid estaba replegado, demasiado cerca de su área, y aún lamentando la expulsión del defensor español. Junto con el ingreso de Pedro unos momentos ante, la cancha se abrió y el juego barcelonista se volvió más directo.
Pero la mayor polémica y el momento de más alta emoción en el partido se viviría en los 84', cuando Andrés Iniesta cayó en el área ante la marca de Pepe y Carvajal. El árbitro no dudó en lo que era una compleja decisión, y así mismo Messi se vestía nuevamente de héroe al convertir desde los doce pasos el cuarto gol de los catalanes, que comenzó a sellar un asalto al hogar de los madrileños.
Con este resultado, en la parte alta de la tabla se cierra la lucha con los cuadros de Madrid con 70 puntos, y Barcelona de escolta, un solo punto más abajo.