Este domingo millones de personas en todo el mundo se sentarán frente al televisor para ver el inicio de la quinta temporada de "Game of Thrones" (Juego de Tronos).

La exitosa serie del canal estadounidense HBO -basada en la saga de novelas fantásticas "Canción de Hielo y Fuego" del escritor y guionista George RR Martin- se ha convertido en un verdadero fenómeno de masas que cuenta con una legión de seguidores incondicionales entre los que se encuentra el mismísimo presidente de EE.UU., Barack Obama.

En su cuarta temporada, "Game of Thrones" siguió deleitando a los espectadores con unos sorprendentes guiones cargados de grandes dosis de intriga, violencia y sexo, y una cuidada escenografía que no tiene nada que envidiar a las grandes producciones de Hollywood.

Además, la serie -centrada en el mítico continente de Westeros y que narra la lucha por el poder de varias dinastías rivales- batió los récords de audiencia de HBO en EE.UU., superando a la mítica "Los Soprano", con una media de 18,4 millones de espectadores semanales.

A estas alturas no hay duda de que "Game of Thrones" -la serie más pirateada de la historia en internet- se ha convertido en todo un fenómeno cultural.

BBC Mundo le da cinco claves para entender qué hay detrás del enorme éxito de la serie de la que todo el mundo habla.

1- Una serie pensada para atraer a todo tipo de público

¿Es usted aficionado al género fantástico? ¿Y al de terror? ¿Le gustan los videojuegos? ¿Y las intrigas políticas? ¿Quizás los dramas familiares? Si respondió que sí a alguna de estas preguntas "Game of Thrones" es para usted.

Y es que según los entendidos, uno de los puntos fuertes de la serie es que ofrece algo para todo el mundo.

La historia es tan intrincada y mezcla tantos géneros que es fácil encontrar algún elemento que resulte atractivo, incluso si a uno no le interesan el resto de tramas secundarias.

Además, "Game of Thrones" tiene un abanico tan amplio de personajes -desde los malvados más malvados hasta los héroes más abnegados- que a los espectadores no les cuesta sentirse identificados con alguno de los protagonistas.

2- Unos guiones trepidantes llenos de giros inesperados

Lo que les suele pasar a los seguidores de "Game of Thrones" es que episodio tras episodio no pueden creer lo que están viendo.

La trama de la serie está repleta de giros inesperados y de muertes imprevistas, además de grandes dosis de intrigas palaciegas y dramas personales.

Nunca se sabe lo que va a suceder a continuación y eso es precisamente lo que da a "Game of Thrones" las dosis de adrenalina y energía que la hacen adictiva.

"Sin duda uno de sus puntos fuertes es que todo sucede muy rápido y están constantemente pasando cosas, con giros de guión muy sorprendentes", señala en conversación con BBC Mundo Robert Thomson, profesor de televisión y cultura popular de la Universidad de Siracusa, en Nueva York.

"Personajes que parecen fundamentales mueren de repente sin que nadie lo espere. Si no se han leído los libros de antemano la historia resulta impredecible", explica Thomson.

Aaron Couch, redactor de la revista The Hollywood Reporter, está de acuerdo en que la trama "es uno de los secretos del éxito" de "Game of Thrones".

"Constantemente están pasando cosas nuevas. En una temporada odias al villano y en la siguiente te cuentan más sobre su pasado y de repente se convierte en el protagonista. Todos esos giros hacen que los seguidores se mueran por saber qué va a pasar en el siguiente episodio", explica Couch en conversación con BBC Mundo.

3- Grandes dosis de sexo y violencia

Gracias a que "Game of Thrones" es emitido por un canal de cable de pago, los guionistas de la serie -conscientes de lo que vende- se permiten ir más allá en cuanto al sexo y a la violencia se refiere.

En estas cuatro temporadas ha sido habitual ver sin ropa a varios de los protagonistas -especialmente a las mujeres- y las escenas de sexo han sido múltiples y variadas, dando cabida a relaciones heterosexuales y homosexuales, felaciones y orgías.

Ello no ha estado exento de polémica, ya que algunos consideran que algunas escenas de violencia sexual resultaban gratuitas.

Los guionistas de "Game of Thrones" tampoco han tenido problemas en incluir sangrientas matanzas e innumerables imágenes de muertes y batallas que han contribuido a atrapar a los espectadores.

4- Una producción de película

Grabada a caballo entre Reino Unido, Islandia, Malta, Marruecos y Croacia, "Game of Thrones" combina unas localizaciones espectaculares con unos cuidados decorados y vestuarios, y unos efectos especiales dignos de los grandes estudios de Hollywood.

"La calidad de producción de la serie no se puede comparar con nada de lo que se puede ver en televisión hoy en día", asegura Aaron Couch, de The Hollywood Reporter.

"Cada episodio tienen un presupuesto unos US$6 millones y ello hace que visualmente 'Juego de Tronos' sea una maravilla", apunta Couch.

5- La locura de las redes sociales

Muchos creen que el éxito de "Game of Thrones" no puede explicarse sin internet.

La complejidad de su guión y la gran variedad de personajes han hecho que sea la serie perfecta para ser comentada al detalle en las redes sociales.

Son muchos los espectadores utilizan Twitter y Facebook para analizar en vivo lo que sucede en cada episodio.

Además, internet, con las múltiples parodias, análisis y comentarios que surgen cada semana, ha ayudado a que el fenómeno de "Game of Thrones" se propague como la pólvora.

"Lo que va sucediendo en cada capítulo se comparte con los amigos y con otros seguidores de la serie y para eso las redes sociales son perfectas. En la emisión de cada episodio hay miles de personas comentando en tiempo real en Twitter todo lo que sucede", asegura Aaron Couch.

"Además algunos actores y creadores de la serie también interactúan con los fans en las redes sociales después de cada episodio, lo que lo hace todavía más interesante", señala el periodista de The Hollywood Reporter.

Robert Thomson también cree que la complejidad de la historia hace que sea perfecta "para que la gente pueda comentar todo lo que está pasando al instante a través de Twitter y Facebook".

"Los seguidores diseccionan hasta el detalle más insignificante de la serie. Ver 'Juego de Tronos' sin comentar lo que está pasando no es tan divertido", apunta Thomson.