Entre el ejército de integrantes de la aristocracia -ellas con sus dos piezas en tonos de primavera y sombreros de diseño, y ellos con sus trajes de corte Saville Row- que primero llegaron a la Abadía de Westminster, hubo una pareja del espectáculo que los opacó: el futbolista David Beckham y su mujer, la ex integrante de las Spice Girls y ahora diseñadora de ropa, Victoria.

Beckham caminaba como lord en un modelo de Ralph Lauren, con un traje de mañana de este diseñador estadounidense, adornado con la medalla de Caballero del Imperio Británico que le otorgó la Reina Isabel II en 2003.

Victoria Beckham se elevaba sobre los tacos más altos de la ceremonia en Westminster, un modelo de Christian Louboutin en charol negro con plataforma y la característica suela roja de la marca. Junto a un tocado del sombrerista Philip Treacy, uno de los de mayor importancia en Inglaterra, eran los accesorios que agregó a un vestido ceñido, corto, azul noche y de corte a la moda que ella misma diseñó para su última colección. Era un ejemplo de recato y vanguardia.

Entre los convidados populares, Elton John, acompañado por su marido, David Furnish, agregó un toque a sus tradicionales anteojos de pasta: una corbata de seda morada. Y otra de las personalidades de la prensa del corazón que destacó entre los primeros invitados fue Chelsy Davy, la rubia de 25 años, pareja que va y viene del príncipe Harry  -hermano del novio, Guillermo- con un conjunto verde agua de la modista italiana Alberta Ferretti, que en Chile importa la boutique de Sarika Rodrik y que han usado Soledad Onetto y Tonka Tomicic.