Diversas críticas han surgido en torno al presupuesto que tendrá la visita del Papa Francisco en Chile. Según dio a conocer La Tercera el fin de semana, el costo de los tres días en los que el Pontífice recorrerá Santiago, Iquique y Temuco, en enero del próximo año, podría llegar a los $ 11 mil millones, de los cuales $ 7 mil millones serán aportados por el Estado.

Hoy, y durante un recorrido con la avanzada del Vaticano, el facilitador del Estado para la visita, Benito Baranda, respondió a la polémica. "Para mucha gente, que a lo mejor se ha quejado de los costos, este no es dinero líquido que se traspasa a la Iglesia, es dinero dentro de la operación del Estado, que se traspasa a los servicios, para cualquier evento masivo, como ocurrió, por ejemplo, con la Copa América", explicó el laico.

"Pueden parecer cifras elevadas, pero no podrías trasladar personas hasta un puesto fronterizo o a funcionarios de Carabineros sin entregarles alimentación, alojamiento y movilización", añadió. Pese a que el coordinador del Estado precisó que los gastos se tratarán de acotar, también aclaró que no será posible reducirlos significativamente, ya que, entre otros, implican la movilización de policías a distintas ciudades y el fortalecimiento de los pasos fronterizos, por la cantidad de extranjeros que arribarán a la zona.

Según Baranda, uno de los aspectos que se han considerado para establecer el presupuesto es que durante la visita papal a Colombia, por cada dólar o peso invertido por el Estado de ese país, la recuperación en varios lugares "superó los 10 pesos o dólares producto de la cantidad de visitantes que llegó a esos sitios: "Desde el punto de vista de los tributos, Chile será un país muy recompensado, pues se van a recuperar los recursos invertidos en esos mismos cuatro o cinco días de la visita".

Comitiva del Vaticano

Una segunda avanzada del Vaticano se encuentra en el país, esta vez liderada por el sacerdote Mauricio Rueda Beltz, quien está encargado de organizar los viajes del Pontífice. Hoy por la mañana, la comitiva vaticana llegó a Iquique, acompañada por miembros de la comisión papal en Chile, autoridades regionales y de ambas policías, además de la Fuerza Aérea y la Armada.

La primera parte del recorrido abarcó una revisión del sector de Playa Lobito, ubicado 22 kilómetros al sur de Iquique, donde se realizará el encuentro masivo con los fieles. Se chequearon los planos y la disposición final que tendrá el escenario, el que se instalará en la zona poniente del terreno.

Benito Baranda comentó que con la presencia de la comisión vaticana se busca definir el programa de actividades del Papa, que será publicado en noviembre.

Por la tarde, la comitiva del Vaticano también visitó la Base Maquehue, en Temuco. Durante las semanas anteriores, se generaron tensiones entre la organización y la Fuerza Aérea, a la que pertenece la base, por el espacio que se utilizaría. Hoy, los enviados de Roma, junto a miembros de la comisión, realizaron un recorrido más privado que el de Iquique.