Como un "honor" calificó Benito Baranda la designación que anoche le informó la Presidenta Michelle Bachelet para que sea el coordinador del Estado para la visita del Papa Francisco a Chile, que el lunes fue confirmada por la Conferencia Episcopal.
En conversación con La Tercera, el presidente de América Solidaria dijo que aceptó el cargo esporádico porque "es difícil rechazar algo así cuando uno también es parte de la Iglesia Católica y siente que esta visita va a aportar mucho al país". Se trata de la primera vez que asume en un cargo público.
Además, agregó que se trata de una "buena visita, sobre todo si uno coincide tanto con las reflexiones sobre la pobreza que hace". Pero también aseguró que lo que le motiva son los lugares a los que llegará.
En esta línea, Baranda señaló que a pesar de que los temas y contenidos de los encuentros que tendrá el Pontífice los definirá el equipo de la Iglesia, "como católico me encantaría que (el Papa) tocara temas complejos. Y él se ha metido en áreas complejas como la migración, por ejemplo, cuando fue a Lampedusa". Lampedusa es justamente una pequeña isla al sur de Sicilia, en Italia, que vive a diario el desembarco de migrantes, donde el Papa celebró una misa en julio de 2013, a poco tiempo de haber asumido en el cargo.
Algo similar podría ocurrir en La Araucanía e Iquique, ciudades que fueron seleccionadas -además de Santiago- para que llegue el obispo de Roma en su gira que se concretará entre el 15 y el 18 de enero de 2018.
Mañana a las 8.30 de la mañana, Baranda sostendrá la primera reunión con la Mandataria, instancia en la que se le explicarán los detalles de su cargo y las tareas que deberá realizar junto al equipo que está integrado, igualmente, por el secretario general de la Conferencia Episcopal, monseñor Fernando Ramos, y el periodista Javier Peralta.