Benjamín Alvarado se dio un gusto ayer. Uno solo. Fue en el hoyo 16 de la segunda ronda del Valero Texas Open. Derrotó ese par tres con sólo dos golpes. Un birdie especial para él.
Fue de los pocos momentos de alegría en una jornada que no terminó bien para el primer chileno en acceder al PGA Tour. No pudo superar el corte en su debut en el circuito de golf más importante y millonario del mundo.
Tras la larga jornada, el golfista nacional se mostró tranquilo. "Estoy bien, contento por la semana que tuve. Fue muy especial debutar, lástima no haber conocido la cancha antes, porque en este campo demandaba mucho saber dónde había que ir", declaró el jugador. "Pero quedé contento, porque estoy jugando contra los mejores del mundo y en la que es considerada una de las tres canchas más difíciles del circuito", agregó el jugador.
Luego de dos rondas disputadas, el nacional sumó siete golpes sobre el par, que lo dejaron lejos de los 82 nombres que hoy y mañana disputarán el título en San Antonio (ver tabla).
El jugador surgido en el Club de Polo San Cristóbal tuvo una jornada extenuante ayer. A primera hora completó la primera ronda del certamen, la que no pudo cerrar el jueves, debido a la falta de luz.
En esa responsabilidad le fue bien, al terminar la mañana había completado sus primeros 18 hoyos y el score era esperanzador: 74 golpes totales, apenas dos sobre el par.
Los números no eran malos. A esa hora se proyectaba que con uno sobre la exigencia de campo se podría superar el corte clasificatorio. Al final del día se sabría que incluso se pasaba con +3. Como fuera, una segunda ronda, que comenzó casi pegado al cierre de la primera, cercana a los 72 impactos del par le hubiera servido para soñar con seguir jugando hoy y mañana.
Pero eso no pasó. La tarjeta mostró cinco impactos sobre la exigencia. Pese al birdie del 16, otros seis bogeys lo dejaban fuera del certamen y de vuelta a Santiago.
Alvarado cerró los últimos nueve hoyos con tres bogeys. ¿Tiró la toalla o arriesgó? El golfista contesta que ninguna de las dos: "La cancha cada vez se ponía más difícil, porque el viento se puso muy fuerte en los segundos 18 hoyos".
Alvarado jugaba su cuarto torneo después de volver al golf, luego de una lesión que lo mantuvo seis meses sin jugar. El golfista, eso sí, descartó cualquier molestia física. "Nada de eso. Me sentí muy bien. Ahora sólo falta sumar minutos en la cancha", explica.
Mirando al Masters
El torneo lo lidera el australiano Steven Bowditch, quien va por el premio mayor: el ganador irá al Masters. Abajo, junto con Alvarado, también fallaron el corte nombres como Ernie Els (+4), Retief Goosen (+9) o Padraig Harrington (+5).