El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, dijo este lunes que el banco central estadounidense no pronostica una recesión, pero señaló que el crecimiento económico del país es demasiado lento como para lograr una baja de la tasa de desempleo.
"Ahora mismo, vemos una economía que se está expandiendo. Vemos al empleo (...) todavía creciendo. Por lo tanto, esperamos que la economía siga creciendo, esa es nuestra mejor proyección por ahora. No estamos esperando una recesión", sostuvo.
"Dicho eso, con una economía que está creciendo solo en el rango de 1,5 a 2%, eso no es suficientemente rápido para bajar la tasa de desempleo. Esa es mi preocupación", agregó.
Reiteró el compromiso de la Fed, realizado en la reunión de septiembre, donde se anunció un nuevo programa de compra de activos sin límites, de mantener vigente una fuerte dosis de estímulo monetario, incluso después que un repunte económico parezca ganar impulso.
"Siempre y cuando la estabilidad de precios sea preservada, seremos cautos de no subir las tasas de manera prematura", declaró Bernanke.
El jefe de la Fed señaló que la inflación ha fluctuado cerca de la meta oficial de un 2 por ciento y que las expectativas de inflación han permanecido estables, lo que sugiere un bajo riesgo de un alza repentina de los precios.
Además, argumentó contra la idea de que la Fed está monetizando la deuda o imprimiendo dinero para mantener bajos los costos de endeudamiento del gobierno.
"Eso no es lo que está pasando y no pasará. Estamos comprando valores del Tesoro en el mercado abierto y solamente sobre una base temporaria, con la idea de apoyar la recuperación económica a través de tasas de interés más bajas", sostuvo.
La economía estadounidense creció a una magra tasa anual del 1,3 por ciento en el segundo trimestre, un ritmo muy inferior al que se necesita para bajar la tasa de desempleo desde el actual 8,1 por ciento.
En respuesta a la pasada crisis financiera y a la profunda recesión del 2007-2009, la Fed bajó su tasa de interés a cerca de cero y compró cerca de 2,3 billones de dólares en deuda hipotecaria y en bonos del Tesoro.
Estas medidas le valieron fuertes críticas, entre ellas de muchos republicanos, por considerar que alientan la inflación.
El candidato presidencial opositor, Mitt Romney, ha dicho que de ser electo no repostularía a Bernanke para un tercer mandato cuando su actual período venza en enero del 2014.
Bernanke cuestionó a quienes dicen que la actual política de la Fed perjudica a los ahorristas, diciendo en cambio que los individuos se beneficiarán con una economía fuerte y en crecimiento.