El estilo de Marcelo Bielsa es reconocido en el mundo. Por eso, cada vez que el técnico argentino se planta frente al micrófono en conferencia de prensa, se espera, al menos, un sabroso análisis futbolístico con su característico sello.
Y si durante toda la temporada le ha tocado recibir más elogios que críticas por la notable campaña que cuaja con el Olympique de Marsella, esta vez le tocó un presente más agrio, y debió salir a hablar tras dos derrotas en línea del club francés.
Primero, el Marsella quedó eliminado de la Copa de Francia tras perder el domingo pasado ante el humilde Grenoble de segunda división. Cinco días después, la historia se repitió, esta vez por la liga, y cayó 2-l ante el Montpellier, resultado con el que cedió liderato de la clasificación al Lyon. Su análisis de la situación fue el siguiente: "El partido con Montpellier fue peor que contra Grenoble. Tiene un rasgo muy claro para explicar la derrota: nosotros, normalmente, recibimos tres o cuatro situaciones de gol por partido, en este caso, fueron cuatro. Y, normalmente, creamos ocho por partido y, en este caso, creamos tres. Entonces, defendimos como siempre y atacamos peor que siempre".
"Hice una descripción no una explicación. Debo ofrecer una explicación, supongo, desde mi punto de vista sin considerarme el dueño de la verdad. A veces se ataca mal porque no se logra elaborar el ataque, es decir, que la pelota no llega con claridad a la zona en la cual se concreta el ataque, desde donde se da el último pase. Haciendo esa diferencia, a veces se llega a hacer el ataque y se finaliza mal, y a veces no se llega a elaborar. En el partido con Montpellier fue uno de los mas fáciles para finalizar el ataque con claridad. Eso se ve o se distingue cuando hay jugadores propios con tiempo para elegir el pase que culmine el ataque. Fue uno de los partidos que más pelotas de ese tipo dispusimos. Y las conclusiones no fueron buenas, logramos elaborar el ataque, finalizarlo era simple y lo finalizamos mal", agregó.
Pero pese al duro análisis futbolístico que plasmó en su charla, al final el rosarino no cargó contra sus pupilos. En lugar de eso, habló de su responsabilidad en la baja en el nivel. "Me niego a hacer pública la crítica de mis jugadores, incluso después de los juegos malos. En la derrota siempre hay un responsable y sé que mi responsabilidad. Por su puesto que hay déficit en el rendimiento, lo percibo y no es que lo niego. No los personalizo y describo mi propia responsabilidad", aseguró el Loco.
"La solución es que el equipo merezca ganar el próximo partido y lo gane. Y mi función es desarrollar las herramientas para conseguirlo con justicia", finalizó.