Con similar extensión de kilómetros y casi el mismo tiempo de funcionamiento, los trenes de cercanía de Valparaíso y Concepción, pertenecientes a la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), viven momentos diferentes. Mientras el Merval, en la V Región, transportó a 20.212.000 personas en 2013 -cifra récord en su histo- ria-, el Biotrén del Biobío disminuyó el número de traslados en comparación a 2012.

A pesar de esto, en la estatal subrayan que existen proyectos para aumentar el número de estaciones de ambos servicios.

El Merval une Valparaíso, Viña del Mar, Quilpué, Villa Alemana y Limache, con 43 kilómetros de vía férrea y 20 estaciones, cuatro de ellas subterráneas.

Marisa Kausel, vocera de Merval, explica que "la experiencia de Metro Valparaíso es exitosa (...). Además, entrega una oferta cada vez más atractiva para el usuario, un servicio eficiente, confiable y seguro".

Por otro lado, Biotrén es administrado por Fesub (filial de EFE) y une, a través de 48 kilómetros, las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, Chiguayante, Hualqui y San Pedro de la Paz, con 33 servicios diarios, que operan durante las horas punta.

Según el gerente de Fesub, Nelson Hernández, "el Biotrén opera en corredores importantes en Concepción, por lo tanto, es un medio utilizado por la gente y representa una buena alternativa de transporte".

DISPARIDAD EN FLUJOS

Durante 2013, Biotrén tuvo una baja de 12% en el flujo de pasajeros respecto de 2012. La empresa explica que esto se debe a que durante el año pasado se programaron menos servicios que la temporada anterior. Además, en San Pedro de la Paz se implementaron en horas punta nuevos servicios de buses, cubriendo sectores que no contaban con locomoción pública. Finalmente, las obras del Proyecto Aumento de Frecuencia -desarrollado en 2013- provocó la suspensión de servicios y retrasos importantes en los tiempos de viaje.

Otro punto en contra, según Hernández, es que el Biotrén no tiene una eficiente conexión con el centro de Concepción. "La estación en esa ciudad se ubica alrededor de 10 cuadras o un poco más de los focos atractores de viaje, a diferencia del Merval, que se mete en la trama urbana de la ciudad". Agrega que "esa es una rigidez del sistema que lo lleva a tener una baja demanda".

A pesar de esta disminución, se espera que para 2015, con la extensión de la línea a Coronel, se dupliquen los pasajeros. "Tenemos aproximadamente un millón 400 mil pasajeros y nuestra meta es pasar a cinco millones con la nueva extensión", dice Hernández.

Merval, en tanto, pronostica transportar este año 20,7 millones de pasajeros, un 2,5% más que en 2013. Según Kausel, "operativamente el servicio tiene altísimos niveles de confiabilidad -sobre el 90%-; las personas asocian nuestro servicio a características claves, como calidad, eficiencia, seguridad, incluso, modernidad".

Además, el ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, afirmó que "vamos a estudiar a partir de mayo la posible extensión de Merval hacia Quillota".

Sobre el servicio en el Biobío, comenta que "uno de los compromisos de la Presidenta en los primeros 100 días es iniciar los estudios para una solución de transporte de alto nivel, ya sea Metro, tranvía o sistema de buses de superficie".