No iba ni siquiera un minuto de juego cuando Pablo Mouche apereció solo en el área de Unión Epañola, pero se perdió el primer gol al desviar su cabezazo.

Esa fue la primera idea de lo poco concentrada que estaba la defensa "roja" y que el final les terminó costando la derrota y la clasificación a cuartos de final de la Libertadores tras caer por 3-2 ante Boca Juniors.

Si a eso se le sumaba un Juan Román Riquelme inspirado, poca opción le quedó al equipo chileno, que terminó desperdiciando una buena oportunidad de avanzar en el torneo.

Parecía que ese inconveniente inicial había sido sólo del momento, ya que Jaime respondió a los 2' con un tiro cruzado que se fue cerca, pero luego Boca comenzó a dominar y Unión comenzó a tirar pelotazos.

De esta forma, Schiavi tuvo un par de claras ganando en el área y a los 26' se terminó sentenciando la serie.

Un tiro libre desde la derecha fue ejecutado por bajo por Riquelme sorprendiendo a todos (los rojos) y en el segundo poste apareció Insaurralde, que de primera dejó sin opciones al portero hispano.

De ahí en más, Unión buscó con tiros desde fuera de Vecchio y Jaime, pero siempre respondió bien Orión, incluso ante un cabezazo de Olarra a los 45' que hubiera significado irse con la igualdad para los de Santa Laura.

Tras el descanso, se esperaba la reacción de los dirigidos de José Luis Sierra, pero cuando se habían jugado solo 5 minutos, Ampuero trató de bajar un balón en la esquina del área, se la dejó a Riquelme, el que esperó ante Lobos la llegada de Mouche, lo habilitó y este puso de forma cómoda el 2-0.

Los problemas siguieron en el fondo del equipo chileno y otra vez Mouche quedó solo frente a Lobos, pero el portero estuvo brillante, y en la contra Pineda tomó un rebote en el área, y la colocó al segundo poste de Orión para poner el descuento.

La ilusión le duró seis minutos a los "rojos", ya que en una contra notable y tras dejar tres defensas en el camino Riquelme puso el 3-1 y el golazo fue aplaudido hasta por los hinchas hispanos.

Sin embargo, Unión no se rindió e Insaurralde le cometió penal a Vecchio, el que atajó Orión tras tiro de Herrera, pero Jaime tomó el rebote y puso el 2-3.

Al final, un tiro de Currimilla y otro de Vecchio, en los que nuevamente respondió de gran forma Orión, fueron las úlimas cartas de los hispanos, que quedaron en el camino ante un rival que apareció en todo momento como muy abordable.