El gobierno boliviano confirmó ayer que enviará una delegación a la corte de La Haya para escuchar los alegatos del juicio limítrofe entre Chile y Perú.

Según dijo el jefe de la Dirección de Reivindicación Marítima (Diremar) de ese país, Juan Lanchipa, el objetivo del viaje es "efectuar un seguimiento de primera mano a las argumentaciones que ambos países expondrán ante la corte. Esto, con la finalidad de determinar las implicaciones jurídicas de estas alegaciones para el diseño de la demanda marítima de Bolivia".

De acuerdo a fuentes diplomáticas, en las semanas previas La Paz retomó su plan de demandar a Chile para obtener una salida al mar con soberanía. El gobierno de Evo Morales contactó abogados, entre ellos uno de Londres, quien habría sumado a otros dos litigantes de su propio bufete.

La noche del sábado, el vicecanciller paceño, Juan Carlos Alurralde, indicó a la agencia informativa oficial boliviana, ABI, que el grupo que viajará a La Haya está integrado por Lanchipa; el embajador ante la ONU, Sacha Llorenti; y el presidente de la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, Héctor Arce. Todos estarán acompañados por el embajador de Bolivia en los Países Bajos, Roberto Calzadilla.

Fuentes diplomáticas explican que si bien Lanchipa está a cargo del organismo mandatado para trabajar en la demanda contra Chile -la Diremar fue creada en 2011 con ese objetivo-, Héctor Arce es uno de los dirigentes paceños mas influyentes en este tema. El diputado mantiene una estrecha relación con el mandatario Evo Morales.

En 2011, La Paz ratificó ante la OEA el Pacto de Bogotá, instrumento que obliga a reconocer la jurisdicción de la corte de La Haya en caso de una controversia, aunque lo hizo objetando el artículo VI, que dice que no se puede demandar por diferendos ocurridos antes de la creación de dicho pacto, en 1948. Esto, pues el tratado que fijó los límites entre Chile y Bolivia es de 1904. Ante aquello, Chile hizo su propia objeción ante la OEA, planteando que la reserva paceña impedía la entrada en vigencia de ese pacto entre ambos países. Vale decir, Santiago no reconocería la jurisdicción de La Haya ante una eventual demanda de Morales.

Al respecto, en el programa Tolerancia Cero, de Chilevisión, el Presidente Sebastián Piñera dijo ayer que "si Bolivia quisiera llevarnos a una corte que no tiene derecho a llevarnos, por supuesto que este Presidente no lo va a aceptar".