Las acciones asiáticas subieron, impulsadas por sólidos datos económicos provenientes de China que también apoyaron los precios de las materias primas y enviaron al dólar a su mínimo en un año contra una canasta de monedas.
Las acciones en Shanghai avanzaron un 2,2% luego de que robustos datos de ventas minoristas, producción e inversión indicaron que la economía china está acelerando, aún cuando las exportaciones cayeron un 23%, enfatizando que la demanda global continúa débil.
"El crecimiento económico real es extremadamente poderoso y sostenible", expresó Dong Xian'an, economista en jefe de Industrial Securities en Shanghai.
Pekín dijo que mantiene la confianza en que alcanzará su objetivo de crecimiento del producto interno bruto (PIB) de un 8% en el 2009.
Las señales optimistas de la economía más dinámica de Asia respaldaron el continuo traslado de fondos de los inversores hacia activos de mayor riesgo, llevando al dólar a su nivel mínimo en un año contra una canasta de divisas.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón subía un 0,4%. El referencial acumula una subida de alrededor del 8 por ciento desde septiembre del año pasado, antes del colapso del banco estadounidense Lehman Brothers.
Japón no siguió la tendencia alcista del viernes en la región y el índice Nikkei perdió un 0,7%, con exportadores como Toyota Motor bajo presión luego de que el yen tocó un máximo en siete meses contra el dólar a menos de 91 yenes.
Los inversores no tuvieron en cuenta una inesperada revisión a la baja en datos del PIB, que mostraron que la economía nipona sólo creció un 0,6% durante el segundo trimestre, una revisión a la baja desde una lectura preliminar de un crecimiento de un 0,9%.
Pero las noticias, sumadas a un avance en los bonos del Tesoro estadounidense, apoyaron a los bonos del Gobierno japonés.
El declive del dólar hacía que el oro al contado se mantuviera firme cerca de los US$1.000 por onza, debido a que el dorado metal es visto como una protección potencial contra la inflación.