Las bolsas subieron hoy en Asia luego de que los inversionitas recibieron con agrado el rebote de un índice manufacturero en China y un crecimiento mayor al esperado en Australia, que frenaron el avance del yen hacia máximos de 15 años contra el dólar.

Los mercados ignoraron el cierre plano en Wall Street, reflejando la creencia de que la recuperación económica de Asia podría mantenerse relativamente bien comparada con Estados Unidos, que enfrenta la posibilidad de una recesión de doble caída.

El sector manufacturero chino recobró algo de fuerzas durante agosto, mientras que la economía de Australia creció a su mayor ritmo en tres años el último trimestre gracias a que los consumidores gastaron más que lo esperado y las exportaciones vivieron un boom en Asia.

"El mercado aún está preocupado por el momento de la recuperación global, pero en base a los fundamentos económicos, algunos fondos dejarán países desarrollados para dirigirse a Asia", dijo Daniel Chan, economista jefe y estratega de administración de fondos de BWC Capital Markets en Hong Kong.

El promedio Nikkei de la bolsa de Tokio subió un 1,2% tras haber tocado momentáneamente un mínimo de 16 meses, impulsado en parte por los datos de China mientras las acciones de tecnológicas ganaban terreno tras la fuerte caída del día anterior.

Las acciones australianas ganaron un 2%, la mayor subida diaria desde comienzos de julio, por el optimismo de los inversores ante el crecimiento de la economía local.

La bolsa de Seúl ganó un 1,3%, impulsada por las acciones de automotrices y minoristas como Kia Motors y Lotte Shoppin,  pero los títulos de las tecnológicas siguieron cayendo en medio de una persistente preocupación por la recuperación de la economía global.

El yen retrocedió luego de que los optimistas datos chinos y australianos reforzaron la apuesta de los inversores por el riesgo.