Marc Hadden, un bombero de Carolina del Sur (EEUU) recibió una llamada de emergencia de última hora. Trataba de una mujer que estaba a punto de dar a luz a una niña, por lo que rápidamente actuó de matrón al darse cuenta que la ambulancia no llegaría a tiempo.
Sin embargo, la historia increíble no terminó allí. La madre inmediatamente después de dar a luz, puso al recién nacido en adopción. Al enterarse y hacer todo lo posible, Marc Hadden intervino para convertirse en el padre de la niña.
El bombero dijo a WMBF News: "Fue tan sólo un llamado normal. Muy rápidamente nos dimos cuenta de que iba a ser un cambio de vida para nosotros".
Marc y su esposa Beth firmaron los papeles de adopción y trajeron al bebé -que llamaron Grace- de regreso a su casa 48 horas después para unirse a ellos y a sus dos hijos.
Beth añadió: "Desde que tuvimos a los niños, sabíamos que queríamos más hijos, pero yo estaba prematura con ellos, así que sabíamos que no era posible tener más bebés".
"Y lo tuvimos en nuestras mentes y en nuestros corazones por años para adoptar y lo dejamos en las manos de Dios. Dijimos que si está destinado a ser, lo será".