"Propuesta de ley de reforma constitucional para continuación del proceso constituyente". Ese es el título del borrador elaborado por el Ministerio Secretaría General de Gobierno (Segegob) para la fase que se inicia luego de la entrega de las bases ciudadanas, lo que se concretó el lunes pasado.
La nueva etapa contempla la presentación, en el segundo semestre, de un proyecto de nueva Constitución. Previamente, se enviará una reforma al capítulo XV de la Constitución para habilitar al Congreso a modificar la Carta Fundamental.
A pesar de que el gobierno tiene presupuestado presentar ese proyecto en marzo, desde hace varios meses que en el Ejecutivo vienen trabajando en propuestas de borrador. De hecho, los primeros en redactar una alternativa fueron, a inicios de 2016, el entonces ministro del Interior Jorge Burgos junto al presidente del Consejo de Observadores, Patricio Zapata.
Fue en octubre pasado que el entonces titular de la Segegob Marcelo Díaz elaboró, junto a su equipo jurídico, una segunda propuesta que fue entregada a la Presidenta Michelle Bachelet y a los ministros del comité político: Mario Fernández (Interior) y Nicolás Eyzaguirre (Segpres).
Ese documento ha sido analizado durante las últimas semanas por las tres carteras, con miras a la preparación de un insumo final.
El texto -al que tuvo acceso La Tercera- propone, tal como está estipulado en el diseño que ha planteado Bachelet, una modificación al capítulo XV. Esto, agregando un nuevo artículo (el número 130) a la Carta Fundamental.
"El Presidente de la República, con el acuerdo de dos tercios de los diputados y senadores en ejercicio, podrá habilitar a los parlamentarios elegidos en la siguiente elección de la Cámara de Diputados, y de la fracción del Senado que corresponda, a iniciar un proceso de adopción de una nueva Constitución", comienza el documento del Ejecutivo.
El texto continúa afirmando que ese inciso inducirá al Congreso a decidir entre las siguientes alternativas: una comisión bicameral, una convención constituyente mixta de parlamentarios y ciudadanos, y una asamblea constituyente. El quórum necesario será de 3/5. Y se agrega que también podrá optarse por un plebiscito para que la ciudadanía elija el mecanismo.
El documento también agrega que "cualquiera sea la modalidad que se adopte, el proceso constituyente se desarrollará en no menos de un año ni más de dos años calendario contados a partir de que se defina el proceso de elaboración de la nueva Carta Fundamental".
Un nuevo factor en la discusión es la incorporación en el borrador de una alternativa en caso de que el Congreso no logre acuerdo en los mecanismos que se proponen. En este caso se plantea que se hará un plebiscito para que la ciudadanía escoja entre comisión bicameral, convención constituyente mixta y una asamblea constituyente.
Segundo camino
El borrador incluye, además, una novedad: una segunda alternativa que no había sido planteada públicamente por el gobierno, que no consiste en un cambio al capítulo XV, sino que en realizar únicamente una modificación al artículo 15, que es parte del capítulo II de la Constitución. Este cambio permitiría elaborar un nuevo proyecto de ley que convoque a un plebiscito por vía legal, en el que las personas decidan si quieren o no una nueva Constitución. Esta opción tendría la ventaja de requerir de un quórum más bajo, de 3/5 de los diputados y senadores, y no 2/3, situación que haría más fácil su viabilidad para el gobierno, considerando que la oposición no está de acuerdo con prosperar en un proyecto de nueva Constitución.
En el Ejecutivo, en todo caso, están conscientes de que este camino podría generar cuestionamientos desde algunos sectores políticos, que verían la salida como una forma de asegurar una aprobación rápida.