La cantante escocesa Susan Boyle fracasó por poco en su intento para convertir su disco debut en el álbum de mayor éxito de ventas del año en Estados Unidos el miércoles, pero aún tiene otra semana para competir por el título contra la estrella de country Taylor Swift.
El estreno discográfico de Boyle "I Dreamed a Dream", la producción de mayor venta en Gran Bretaña, ha vendido 2,98 millones de copias en norteamérica, tras cinco semanas consecutivas en el primer lugar del ranking de discos, señaló la firma Nielsen SoundScan.
"Fearless" de Swift, el tercer disco más exitoso del 2008, vendió 3,16 millones de copias este año, entregando a la cantante de 20 años un margen de cerca de 175.000 unidades por encima de Boyle.
La semana de ventas de Nielsen SoundScan terminará el domingo, pero la firma incluirá los primeros tres días del 2010 en una semana 53 del 2009.
El éxito de tanto Boyle como Swift, además de la cantante de dance-pop Lady Gaga, a quien Boyle reemplazó en el ranking británico de discos de este año, muestra cómo la industria de la música depende de rostros nuevos para impulsar las ventas de álbumes.
Sin embargo, las ventas estadounidenses en general están encaminadas a terminar el 2009 con un descenso de cerca de un 13 por ciento, marcando la octava caída en nueve años.
La industria discográfica no ha logrado asumir el impacto de la piratería o de la fuerte competencia que presentan formas alternativas de entretenimiento como juegos de video.
Boyle, de 48 años, saltó a la fama en abril cuando compitió en el concurso de talentos británico "Britain's Got Talent" y ya se consagró como la artista que más discos ha vendido en el mundo con más de 6 millones de copias.
