La británica BP solicitó a Venezuela autorización para negociar la venta de sus activos en el país petrolero, dijo el domingo el ministro de Energía, Rafael Ramírez.
Sin embargo, la autoridad aclaró que la firma aún no ha presentado una propuesta formal de cara a la negociación. "Ellos (BP) nos enviaron una comunicación diciendo que estaban en conversaciones, que si los autorizábamos y dijimos que sí", dijo Ramírez el domingo tras participar en las elecciones legislativas del país.
La gigante británica está buscando vender sus activos en diversos países de América para compensar el coste del derrame en el golfo de México.
El mes pasado, Ramírez dijo que BP necesitaba la autorización del Gobierno del presidente Hugo Chávez para vender su participación minoritaria en dos proyectos de exploración que tiene con la estatal PDVSA.
Los activos de la firma en Venezuela estarían valorizados entre US$850 millones y US$1.000 millones.
INVENTARIOS Y PRECIOS
Por otra parte, Ramírez dijo que su país ve con preocupación los altos inventarios de crudo y que el objetivo para este año es la estabilidad en el precio del petróleo que considera "justo" a US$100 por barril.
"Los problemas de inventario nos preocupan porque seguimos estando bastante por encima de los máximos de los últimos cinco años. Si los inventarios siguen altos no vamos a poder tener un equilibrio en el mercado", explicó el funcionario.
"No dijimos que nuestro objetivo era alcanzar (un precio de US$100 por barril) este año; nuestro objetivo este año es estabilidad", precisó Ramírez, también presidente de la estatal PDVSA.
El funcionario dijo a mediados de septiembre que el "precio justo" del barril de petróleo debe estar cerca de los US$100.
Los precios del crudo han oscilado entre US$70 y US$80 durante buena parte de este año, luego de que se derrumbaran en el 2009 por la crisis económica global.
TERMINAL EN BONAIRE
Ramírez dijo que no hay condiciones para que el terminal de PDVSA, Bopec, en la pequeña isla caribeña de Bonaire se mantenga cerrado.
"No creo que es del interés de las autoridades de la isla (de Bonaire) tenerlo cerrado un año. No hay razón alguna. No hay una situación como para cerrar el terminal. Somos respetuosos de las autoridades locales pero no hay realmente una condición objetiva como para mantenerlo cerrado", dijo.
Dicho terminal permanece cerrado desde hace tres semanas cuando un incendio alcanzó dos de los 23 tanques de almacenamiento de crudo y derivados clave para los despachos petroleros hacia China y Estados Unidos.
Tras el siniestro, autoridades de la isla dijeron que mantendrían cerrado el terminal hasta nuevo aviso mientras investigan las causas del incendio.
Bopec, junto a los terminales vecinos de Borco, en Bahamas, e Isla, en Curazao, integra el corazón de la logística de transporte de PDVSA hacia el mercado asiático.
Ramírez reiteró que la paralización del terminal de Bonaire no ha afectado los despachos de PDVSA a Asia. "Eso no ha impedido cumplir con nuestros compromisos, con nuestros despachos. Bonaire es solamente un apoyo en nuestras operaciones. Tenemos muchos terminales, en Curazao, en Venezuela, en Cuba", dijo.
"El terminal de Bahamas (Borco) lo estamos usando. Nosotros nos desprendimos de los activos como tal, pero lo tenemos rentado. Ahí tenemos más de 30 millones de barriles (de capacidad de almacenamiento)", explicó.