Tacones, vaqueros, blusas estampadas, originales corbatas y bolsos de tamaños y colores variados, se muestran desde hoy en los hangares del antiguo aeropuerto berlinés de Tempelhof, gracias a la inauguración de la Bread & Butter, la feria de moda juvenil y urbana más "cool" del continente.
Más de 500 marcas exhibirán hasta el próximo viernes sus últimas creaciones y diseños en el marco de una feria que este año lleva el eslogan de "Premier League", en clara alusión al hecho de que el acontecimiento coincide con el Mundial de Fútbol.
FIRMAS
Firmas conocidas, junto a otras que pretenden hacerse un hueco en el panorama de la moda urbana, levantan originales tiendas "in situ" y ofrecen diferentes regalos publicitarios para atraer a los profesionales, prensa y público en general.
Cada marca se esfuerza por seleccionar una buena composición para sus expositores y como si de una lucha de extravagancia se tratara, el visitante puede caminar por los pasillos del aeropuerto entre juegos de luces, locales construidos con materiales reciclables y hasta pararse en anuncios de moda creados con chorros de agua.
La multitud de prendas expuestas permite dirigir la mirada de los estampados más coloristas a las creaciones más sencillas y de los tacones de alturas casi imposibles a unas cómodas sandalias.
Los antiguos mostradores de las compañías aéreas se transformaron en oficinas de atención a los visitantes, mientras que las cintas de recogida de equipajes reparten publicaciones especializadas, entre ellas la "Brand Bible" (Biblia de las marcas).
FASHION
Ropa deportiva, informal, vaqueros, ropa de vestir, lo más "fashion", marcas de calidad y estilo urbano para mujer y hombre, son las diversas áreas en las que tienen cabida los expositores, a los que este año se suma una nueva, el Kids Camp.
Ubicada en dos grandes carpas de circo y amenizada por payasos, el área infantil alberga las creaciones dirigidas a los más pequeños.
"Se trata de una novedad" de esta Bread & Butter, señala el gerente de la feria, Karl-Heinz Müller, quien explica que para 2012 está previsto que exista una feria única y especializada en ropa de niños, "ya que cada vez cobra más importancia en el sector".
Junto a las carpas, un escenario con una gran pantalla enfrenta a un graderío con capacidad para 3.000 personas, pensado para que los visitantes a la feria puedan disfrutar, tanto de los diferentes conciertos programados, como de los partidos de fútbol del Mundial.
TEMPELHOF
Decenas de personas hacían fila el primer día para recoger las acreditaciones, mientras que cientos de ellas llegaban en taxi y metro al aeropuerto. Otras miles paseaban ya entre los tenderetes ubicados en Tempelhof; señal del éxito y capacidad de atracción con el que cuenta la Bread & Butter, según explica su gerente.
"Se trata de un evento de moda al que no sólo vienen visitantes profesionales, sino también nuevos talentos que quieren adentrarse en este mundo o gente interesada en este campo", afirma.
La Bread & Butter nació en Colonia (oeste de Alemania) en 2001, para trasladarse a Berlín un año después.
En julio de 2005 comenzaron a organizar ediciones paralelas en la Fira de Barcelona, que finalmente llevaron a la cancelación de la cita berlinesa, hasta que en 2009 el ofrecimiento por parte del ayuntamiento de Berlín del histórico aeropuerto de Tempelhof como sede provocó el regreso del evento a Alemania.
BREAD & BUTTER
"La Bread & Butter es una feria especial", asegura Mikel Feijoo Elzo, propietario de la marca española Skunkfunk, "porque además de las tareas comerciales, tiene eventos lúdicos que hace que la gente se lo pase bien y le guste venir".
"El mercado está tocado", explica Javier Navalón, director comercial de la marca de zapatos Sancho, "pero eventos como éste nos permiten abrirnos al mercado internacional y entrar en contacto con las nuevas tendencias".
Una colorida imitación de la puerta de Brandeburgo realizada en cartón actúa de epicentro de la feria, dejando a izquierda y derecha los diversos stands y controlando las miles de personas que pasean por la Bread & Butter, que el año que viene cumplirá 10 años.
La feria de moda coincide estos días en la capital alemana con la Semana de la Moda de Berlín, que se prolongará hasta el domingo, y en la que desfila mañana la colección de Primavera-Verano 2011 de Custo Barcelona.