Un juez adjudicó la custodia de Britney Spears a su padre después de que esta fuera internada en un centro psiquiátrico en 2008. Ahora, la cantante podría recuperar el control de su vida si un examen médico da su visto bueno. Sin embargo, aunque el padre de Britney dejara de ser su tutor, los negocios de la cantante de 'Womanizer' seguirían bajo custodia.

Los últimos años han sido difíciles para la cantante en el plano personal, hasta el punto de perder el control legal sobre su persona. En 2008, después de que la cantante fuera hospitalizada en una unidad psiquiátrica tras una serie de escándalos, el juez entregó la custodia de Britney a su padre James Spears.

Éste debía encargarse de la seguridad de su hija, quien no parecía reunir las condiciones para cuidarse a ella misma ni a sus propios hijos. Pero parece que la situación está más calmada y James quiere que su hija vuelva a tener pleno control sobre su vida.

Así, ahora, y casi dos años después, la cantante de Toxic podría recuperar la custodia legal sobre su persona. Según la web TMZ, ha habido "varios y prolongados encuentros últimamente entre los abogados y los inspectores del caso", que estarían negociando las condiciones para devolver a Spears el control sobre su vida.

Pero en estos encuentros no se puede decidir realmente qué hacer con la vida de Britney, sino sólo evaluar la situación. La última palabra la tiene un experto, un psiquiatra aprobado por el juzgado, que evaluará a la cantante y decidirá si está preparada para llevar las riendas de su vida o no.

En cualquier caso, y si finalmente el juicio es positivo para Britney Spears, aún hay ciertos asuntos sobre los que no podrá tener el control. Según TMZ, "hay dos tipos de custodia: una sobre la persona de la cantante y otra sobre sus negocios. La referente a sus asuntos de negocios continuará".