El gobierno británico convocará a elecciones generales en Irlanda del Norte en lugar de suspender la Asamblea de Stormont en caso que los partidos políticos del Ulster no lleguen a un acuerdo sobre la devolución de poderes de Londres a Belfast en materia de Seguridad y Justicia.
El primer ministro británico, Gordon Brown, le dio el ultimátum al jefe del Partido Unionista del Ulster (UUP), Reg Empey, a través de una llamada telefónica el martes por la noche.
Según Brown, la falta de un acuerdo en Irlanda del Norte dejó al descubierto lo "disfuncional" que puede ser el Ejecutivo de Stormont.
Desde hace varias semanas, los principales partidos norirlandeses, entre ellos el mayoritario Democrático Unionista (DUP) y el nacionalista Sinn Fein, negocian para alcanzar un acuerdo por el traspaso de poderes de Londres a Belfast en materia de Seguridad y Justicia, como también sobre el manejo de los desfiles de la anticatólica Orden de Orange.
El Sinn Fein quiere que dichos poderes sean transferidos inmediatamente como parte del acuerdo, mientras que el DUP pide garantías específicas antes de un traspaso.
Las tratativas actuales representan el mayor período sostenido de negociaciones desde que comenzó el proceso de paz en Irlanda del Norte, en la década de los '90.
