La cuarta etapa del Tour de Francia tuvo de ganador al dueño de casa Arnaud Demarre (FDJ), en la etapa de Mondorf Les Bains y Vittel, de 206,5 km. Pero no es la victoria del galo lo que más llamó la atención del sprint, sino más bien lo accidentado del final, donde dos ciclistas sufrieron feas caídas en los últimos metros.
Y fue el esloveno Peter Segan autor de una de ellas, en una acción completamente antideportiva. A casi 200 metros de la meta, el ciclista de equipo Bora-Hansgroh metió un codazo al británico Mark Cavendish (ProTeam Dimension Data), quien cayó fuertemente contra las vallas de contención y luego fue atropellado por otro corredor. En el vídeo se aprecia que incluso le pasaron por sobre la cabeza.
La acción ha sido criticada duramente y está a la espera de un análisis por parte de los jueces de la prueba. Sagan, fue quizás traicionado por su ambición, pues justo ayer se impuso en la tercera etapa, corriendo incluso una pequeña parte de la carrera sin un pedal.
Esta no es la primera vez que Sagan se pasa de revoluciones. En marzo de 2013, al salir segundo en una etapa del Tour de Flandes, el esloveno no encontró nada mejor que tocar el trasero de una promotora, justo en el momento en que ésta posaba con el ganador de la prueba, el suizo Fabian Cancellara. Más tarde, Sagan pidió disculpas públicas.
Demarre logró su primer triunfo de etapa en la Grande Boucle, mientras que el británico Geraint Thomas (Sky) conservó el maillot amarillo pese a caerse cuando quedaba aproximadamente un kilómetro.