"El acuerdo no se dio, pero hay que destacar que en este debate por más de 24 horas hay un consenso por el lado de los parlamentarios de la Alianza por Chile de que este Presupuesto ataca problemas fundamentales planteados durante el debate". Con estas palabras, el ministro de Educación, Felipe Bulnes, se refirió a la tramitación del erario público para el próximo año en el Senado, que finalmente despachó todas las partidas para que se continúe con el tercer trámite constitucional.
"Estamos convencidos que estamos haciendo cambios muy importantes. Este es un presupuesto que crece en 1100 millones de dólares y un poco más todavía; crea una beca para 60% de los estudiantes de educación superior y crea un crédito universal para que los estudiantes paguen una vez que se reciban y sólo un monto máximo de 10% de sus remuneraciones", explicó.
Además, aseguró que "tenemos las bases para empezar a plantearnos como país, con una visión de Estado, en la idea que estamos empezando a encarar problemas que estaban arrastrados hace demasiado tiempo y que salieron a la superficie, y que más que ser una amenaza son una oportunidad".