Tal como fue anunciado en mayo pasado, la firma Burberry regresó a la capital británica y nada menos que a cerrar la vigésimo quinta edición de la Semana de la Moda de Londres.
Una gran carpa blanca ubicada en los jardines del Chelsea College of Art & Design fue el escenario perfecto para que Christopher Bailey, director creativo de Burberry desde hace ochos años mostrará el anticipo de la firma para temporada Primavera-Verano 2010.
Numerosas celebridades relacionadas al mundo de la moda quisieron estar presente en este importante momento de la moda londinenses y así Gwyneth Paltrow, Victoria Beckham, Liv Tyler, Emma Watson, Mary Kate Olsen, Anna Wintour y Carine Roitfeld fueron llegando de a poco.
DE MILÁN A LONDRES
En relación a su decisión de participar en la Semana de la Moda de Londres, Bailey aseguró que "se sentía como el momento adecuado para hacerlo". Burberry se ha presentado en Milán desde que asumió en mayo de 2001, pero este año la empresa abrió una nueva sede en Londres y quería celebrar el vigesimo quinto aniversario de la Semana de la Moda de Londres y el Consejo Británico de Moda.
"Sentí que es un buen momento para celebrar," dijo Bailey. "Hay una energía asombrosa en Londres. Nuestra oficina de diseño se basa aquí y es maravillosa la creatividad de las artes, el diseño, el cine y la literatura."
Sin embargo, Bailey no afirmó si el cambio sería permanente. "Realmente no hemos pensado en lo que va a suceder después", dijo. "Pensamos temporada por temporada. No es un sí definitivo. Contrariamente a la creencia común, estas cosas son instintivas".
LA COLECCIÓN
La colección Primavera-Verano 2010, que estuvo a cargo del diseñador Christopher Bailey, nacido en la ciudad de York, mantuvo la misma línea que viene proponiendo hace años: convertir a Burberry en una importante firma de lujo.
Bajo una lluvia de lentejuelas plateadas, Bailey mostró una poética pasarela en la que mezcló una paleta de colores en tonos rosa pálido, lila, verde claro beige y dorado.
Transformó el clásico trench Burberry en un precioso abrigo rosado, lila o dorado con mangas con vuelos, pero mantuvo un guiño a los orígenes militares de la marca y los combinó con cinturones o correas en tonos beige.
Polleras plisadas, maxi abrigos de piel sintética, mini vestidos de gasa y sandalias con calcetines (para evitar la tan de moda ankle boot) completaron una colección que sin duda será comentario obligado por mucho tiempo.