Los esquipos rescatistas colombianos buscaban hoy a por lo menos 15 personas que siguen desaparecidas bajo el alud que sepultó un barrio de la ciudad occidental de Manizales y que ya deja 44 muertos, dijeron fuentes de la Cruz Roja Colombiana (CRC) en Bogotá.
La cifra de víctimas aumentó con el hallazgo, durante la mañana de este martes, de los cadáveres de otros dos vecinos del sector arrasado por el deslizamiento.
Los organismos de socorro no descartan la posibilidad de que haya vida bajo los escombros de las 16 casas o edificaciones arrasadas por el deslizamiento de tierras luego del hallazgo de un perro. El animal fue rescatado a salvo el domingo, al día siguiente del comienzo de la emergencia, cuando los equipos lograron extraer a los últimos cinco heridos del total de 18 que fueron recuperados con vida.
Los expertos rescatistas indicaron que "los esfuerzos están en hacer una remoción de escombros de manera muy técnica, para cualquier posibilidad de vida".
La zona de desastre es una parte del barrio Cervantes, cerca del centro de Manizales, la capital departamental de Caldas, y en ella intervienen unos 600 voluntarios o funcionarios del cuerpo de bomberos, militares, policías y de la Defensa Civil Colombiana (DCC), además de la CRC.
El área de la emergencia es muy estrecha, por lo que en ella solo pueden trabajar al mismo tiempo unos 200 socorristas. Además de las víctimas, el alud dejó damnificadas a 158 personas de 35 familias.
La emergencia es la peor que se ha registrado actualmente por las lluvias en Colombia, país que afronta desde mediados de septiembre último la segunda temporada anual de invierno, que normalmente va hasta finales de diciembre, y que deja hasta ahora al menos 81 muertos.