De cara a la conformación del Congreso que asumirá en marzo, y que incluirá el aumento de 120 a 155 diputados y de 38 a 43 senadores por los próximos cuatro años, la Cámara Baja se abocó en 2017 al estudio del reglamento para adaptarlo a la nueva realidad del trabajo legislativo.
La labor recayó en una subcomisión de Constitución, integrada transversalmente por diputados como Leonardo Soto (PS), Arturo Squella (UDI), Ricardo Rincón (DC) y Guillermo Ceroni (PPD), quienes el lunes dieron luz verde a una serie de cambios inéditos en el funcionamiento de la corporación.
La propuesta fue aprobada ayer en general por la comisión de Constitución, por lo que será vista la próxima semana en sala, donde los parlamentarios podrán añadir modificaciones.
"Es una modernización de nuestro reglamento muy necesario y que pretende establecer una regulación del funcionamiento de la Cámara para los próximos veinte años. Espero que fortalezca y haga más transparente el funcionamiento de la Cámara", dijo Soto.
Entre los cambios destacan la creación de una tercera vicepresidencia -lo que según algunos podría requerir de mayores recursos-, así como la inclusión de nuevos criterios para la elección de la testera.
"Una propuesta interesante, para darle un mayor conocimiento de las decisiones que toma la mesa a la minoría de turno, es generar una nueva y tercera vicepresidencia integrada por quien presidió la segunda lista con mayor votos y que no logró quedarse como mesa", explicó Squella.
La batería de medidas considera también que la elección del presidente y los vicepresidentes de la mesa sean postulados a través de listas y no mediante promoción de cargos individuales, como ocurre en la actualidad. Además, se busca hacer público el sufragio de los legisladores, terminando con la votación secreta.
Las modificaciones reglamentarias se producen en medio de las intensas negociaciones de los distintos bloques políticos para alcanzar la presidencia de la mesa. De hecho, en momentos en que el PS, PPD, PR y el PC buscan alcanzar un acuerdo global con la DC y el Frente Amplio para presidir la testera e integrar las comisiones, en la Nueva Mayoría aseguran que el FA había impulsado alternativas como la votación pública de la testera y por listas.
Las mismas fuentes señalan que desde el Frente Amplio se ha buscado también modificar criterios en la conformación de las comisiones, priorizando a las coaliciones políticas por sobre los partidos. La medida no habría alcanzado acuerdo, ya que algunos consideran que beneficiaría principalmente al FA, que congrega a más de 4 partidos con representación parlamentaria en sus filas.